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El hijo de Sergio Dalma fruto de su relación con Maribel Sanz, Sergi Capdevila, saltaba a los medios de comunicación tras participar junto a su madre en el talent show de Telecinco '¡Mira quién salta!'. Pero parece que esta exposición pública no ha hecho ninguna gracia al cantante, quien ha dejado de mantener una relación fluida con su hijo.
En una entrevista publicada en la revista '¡Qué me dices!', el que se ha convertido en el ganador del concurso de saltos, confiesa a Kiko Hernández que lleva más de cinco meses sin hablarse con su padre. Aunque desmintiera el pasado mes de mayo los rumores sobre un distanciamiento en su relación, confiesa que todo comenzó cuando decidió participar en el concurso y le llamó para contárselo. "Se enfadó bastante, sobre todo porque dejara el trabajo de camarero que él me había buscado", asegura.
El joven, de 19 años, se lamenta de haber pasado una infancia en la que no consiguió superar que sus padres se separaran. Aunque el divorcio entre el cantante y la presentadora se produjo cuando tan solo tenía dos años, "siempre hay uno que falta. En mi caso, yo encontré más apoyo en mi madre que en mi padre", afirma.
Un pelín decepcionado
Tampoco deja en muy buen lugar a Dalma cuando asegura que tanto él como su madre han pasado apuros económicos y no han recibido ayuda de ningún tipo : "Mi padre es catalán y de la vieja escuela. Si quieres algo, te lo tienes que ganar tú". Además, el joven afirma que uno de los momentos más duros en la relación con el cantante fue cuando, teniendo 16 años, se negó a llevárselo de gira con él: "Le pedí a mi padre que me llevara con él a Argentina y me dijo que era demasiado presupuesto".

