Unas acusaciones a las que la propia Irene Rosales ha tenido que hacer frente ahora asegurando que "mi postura es muy complicada". Como ya había dicho anteriormente, la colaboradora no estaba dispuesta a hacer lo mismo de lo que Kiko Rivera acusa a su propia madre: alejar a sus hijas de una parte de su familia hablándoles mal de ella. "Mis hijas tienen una abuela, es la única que tienen, y de mi boca no van a salir palabras malas hacia ella".
Rosales aseguró que ella no quería hacer nada de lo que después pudiese arrepentirse o que alguien puede utilizar en su contra, como podría pasarle por decir algo malo contra Isabel Pantoja en una situación desfavorable para ella como es esta: "A mí nadie me tendrá que echar nada en cara. Mi postura es al lado de mi marido, y puedo ponerme a despotricar de la madre de mi marido, pero no quiero", decía tajante: "A mí no se me puede obligar a criticarla si Kiko paso malos ratos con su madre".
Respecto a un supuesto audio de la Pantoja hablando mal de ella, Rosales sigue optando por la misma postura de no decir una mala palabra de su suegra. No obstante, si que reconoce que le gustaría que su suegra parase estos temas de conversación si realmente era falsos, algo que ella si haría si fuese al revés: "Yo he pensado muchas veces en llamarla, pero también tiene que salir de su parte desmentir si se dice algo así de mí", confesaba.