Ni por un antepasado de Lady Di, ni por el personaje de cómic. 11 meses después de su nacimiento, los Duques de Sussex han revelado por qué eligieron este nombre para su hijo.
Cuando nace un bebé de la realeza hay expectación por conocerle y por saber qué nombre o nombres se le han puesto. El Príncipe Harry y Meghan Markle tardaron dos días en presentar a su primogénito, y ese mismo día comunicaron que se llama Archie Harrison, que su apellido es Mountbatten-Windsor y que no tiene títulos pese a que podría llevar el de Conde de Dumbarton, título subsidiario del Duque de Sussex, y a que la Reina Isabel podría haber firmado una patente real para que tuviera tratamiento de Alteza Real y dignidad de Príncipe de Sussex. Aquella decisión fue una declaración de intenciones para el Príncipe Harry y Meghan Markle.
En aquel momento, los medios de comunicación nos lanzamos a hacer cábalas sobre por qué los Duques de Sussex habían elegido unos nombres tan poco royals para su hijo. El Harrison era evidente, es un patronímico de origen inglés que significa 'hijo de Harry' y que daba un toque estadounidense para honrar así a ambos progenitores. ¿Y qué pasa con Archie? Ni un antepasado ni el personaje de comic
La principal versión es que les había gustado el nombre de Archibald, o mejor dicho, el diminutivo con el que llamaron a su hijo. En su árbol genealógico hubo un Archibald, un ascendiente de Lady Di, Archibald Campbell, noveno Conde de Argyll, que vivió entre 1629 y 1685. Es poco probable que se inspiraran en él. Tampoco en 'Archie', un cómic estadounidense de los años 40 del siglo XX que ha inspirado la serie 'Riverdale', que tiene como protagonista a Archie, papel que interpreta KJ Apa, que por ser neozelandés tiene a Isabel II como su Reina. Nada más lejos de la realidad.
Para conocer la verdad han tenido que pasar 11 meses desde aquel mayo de 2019. Los Duques de Sussex han revelado el nombre y los fines de su entidad benéfica, a la que tuvieron que dar una vuelta después de que la Corona no les diera permiso para utilizar la marca Sussex Royal. Eligieron el nombre Archewell, pero no fue una inspiración a partir de su hijo, sino al revés.
"Conectamos con ese concepto para la organización benéfica que esperábamos construir algún día y después se convirtió en inspiración para el nombre de nuestro hijo. Hacer algo con significado, algo que importe", señalaron a The Telegraph una vez que el medio empezó a tener pistas sobre sus planes. Pensaron en llamarla Arche Foundation o Archeway, hasta que Archewell terminó de conquistarles. ¿Por qué Arche? "Es un nombre que combina una palabra antigua sobre fuerza y acción con otra que evoca los recursos profundos a los que cada uno de nosotros debemos recurrir". Además, Arche significa en griego "fuente de acción, origen, principio".
No hay duda de que Archewell es un principio y una fuente de acción, igual que Archie fue el principio, el principio del nacimiento de su familia y también el origen del Sussexit, ya que fue el momento en el que terminaron de entender que no serían felices si seguían con la vida que llevaban desde su boda. Archewell es un comienzo de una vida, una vida en la que Archie es el centro de todo.