Así son y así se llevan Jason y Justine Bateman, dos hermanos que llevan la interpretación en las venas

Comenzar una carrera en el mundo audiovisual a una edad muy temprana, hacerlo junto a tu hermano y mantenerse a lo largo del tiempo es toda una hazaña que bien merece ser contada. Pues bien, esto es lo que les ha ocurrido a Jason y Justine Bateman, dos hermanos que apenas siendo unos adolescentes comenzaron a formar parte de la industria televisiva y, desde entonces, no la han abandonado.

Ya se sabe que compartir profesión con la familia no siempre funciona y que a veces la combinación de trabajo y parentesco termina por debilitar las relaciones. Sin embargo, parece que este no ha sido el caso de los hermanos Bateman, pues aunque ambos han desarrollado sus respectivas trayectorias profesionales por separado, su relación no podría ser más cercana.

Ahora bien, ¿cómo no dedicarse al mundo del espectáculo cuando lo llevas en los genes? Al menos eso es lo que debieron pensar nuestros Hermanísimos de esta semana, quienes no han podido ejemplificar mejor el refrán de 'De tal palo tal astilla'. Y es que su padre, que se llama Ken Bateman, no solo es productor y director de televisión en Estados Unidos, sino que también ha protagonizado películas y ha fundado uno de los estudios de interpretación más utilizados en Hollywood. Pero, ¿quiénes son realmente y cuál es su relación? Así son y se llevan Jason y Justine Bateman.

Justine Bateman

Nació en 1966 bajo el nombre completo de Justine Tanya Bateman y con tan solo quince años hizo su primera aparición televisiva en la famosísima serie de televisión 'Family ties' que, de hecho, le valió dos nominaciones a los Premios Emmy y una a los Globos de Oro. En ella permaneció hasta 1989 y desde entonces fue una habitual de la pequeña y la gran pantalla con series como 'Mujeres desesperadas' o películas como 'Satisfaction' en la que compartió cartel con la mismísima Julia Roberts.

Sin embargo, esta veterana actriz no se conformó con su aparición en pantalla, sino que años después se lanzaría a trabajar detrás de las cámaras. Y parece que no le ha ido mal, ya que desde que tomara la decisión en 2007, Justine Bateman no solo ha conseguido producir numerosos cortos, como el denominado 'Cinco Minutos' que consiguió estrenar el prestigioso Festival de Cine de Toronto, sino que también logró su primer trabajo como guionista en la exitosa 'Los Magos de Weverly Place', serie que descubrió y lanzo al estrellato a Selena Gomez.

Ahora bien, sus aficiones van más allá del cine y la televisión. Y es que la actriz, productora y directora es una apasionada de actividades tan dispares como la aviación o el submarinismo. Por ello, Justine Bateman consiguió sacarse el título de piloto para aparatos de un solo motor, así como el certificado que la acredita como experta buceadora.

De todas formas, no todo han sido luces en la vida de Justine Bateman. Por un lado, cuando tenía 17 años, la productora le prohibió acudir a la universidad con motivo del contrato que tenía vigente y, aunque aquello no le gustó, la actriz quiso sacarse esa espinita y en 2016 conseguiría licenciarse en Gestión de Medios Digitales.

Al mismo tiempo, la actriz vivió uno de sus peores episodios cuando fue diagnosticada con un trastorno alimentario que, tiempo después, ella mismo confesó haber sufrido. "Llegué a lo más alto golpeándome con lo más bajo. Me he convertido en la persona que siempre quise, aunque no de la forma que esperaba. Me di cuenta que sufría un trastorno de la alimentación y fui a rehabilitación". Afortunadamente ya está recuperada y, sin duda, para ello fue indispensable el apoyo de su marido, el empresario Mark Fluent. El matrimonio se casó en 2001 y, fruto de su relación, nacieron sus dos hijos, Duke y Gianetta.

Jason Bateman

El pequeño de los hermanos Bateman nació en 1969 y, a pesar de ser el benjamín de la familia, lo cierto es que le tomó la delantera a su hermana en lo que se refiere a la trayectoria profesional. Jason Bateman comenzó su andadura frente a las cámaras en la mítica 'Casa de la Pradera', cuando tan solo tenía doce años, y a ella le seguirían 'El coche fantástico' o 'Silver Spoons'.

Ahora bien, en los años posteriores Jason Bateman desapareció del mapa y sus más fieles seguidores tuvieron que esperar hasta 2003 para poder verle de nuevo en acción con 'Arrested Development'. Y es que durante aquellos años de parón el intérprete trató de superar su adicción al alcohol y las drogas. No obstante, una vez que consiguió salir del agujero, lo cierto es que lo hizo a lo grande porque en 2005 fue premiado con un Globo de Oro y desde entonces no ha dejado de trabajar como así lo demuestran no solo sus papeles en 'Hancock' o 'Juno', sino también la estrella que, desde 2017, tiene en el Paseo de la Fama de Hollywood.

Al igual que le sucediera a su hermana, los problemas de salud también le obligaron a permanecer apartado de la industria durante unos meses, aunque en su caso el motivo fue la presencia de un pólipo en la garganta que, por suerte fue benigno, y del que sin embargo tuvo que ser intervenido. No estuvo solo, ya que a su lado siempre ha estado su mujer, la actriz Amanda Anka.

Tal es la compenetración que tienen los hermanos Bateman, que incluso pasaron por el altar en el mismo año y, aunque en el caso del más pequeño salió a la luz que el matrimonio acudía a terapia de pareja, lo cierto es que ambos parecen haber superado sus problemas y hoy forman una feliz familia junto a sus dos pequeñas.

La relación de los hermanos Bateman

Si bien no suelen prodigarse mucho en las alfombras rojas ni compartir instantáneas con sus seguidores en las redes sociales, lo cierto es que Jason y Justine Bateman mantienen una relación excelente. Ahora bien, su infancia y adolescencia no fue fácil, puesto que fue el actor el que contó cómo junto a su hermana, fue el encargado de mantener económicamente a sus padres durante los años de máximo apogeo.

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Una publicación compartida de Justine Bateman (@_justinebateman_)el 21 Oct, 2017 a las 4:57 PDT

Además, los hermanos solo tienen buenas palabras el uno para el otro, como cuando Jason defendió a su hermana de ciertos críticos en la prensa que la acusaban de haberse retirado del mundo del espectáculo para cuidar de sus hijos. Sin embargo, él no se lo pensó y declaró: "Ella ya no es tan ambiciosa como antes y ahora disfruta de sus hijos. Por ello ha preferido quedarse en casa con ellos y lo entiendo, teniendo yo una niña de diez meses". Sin duda un bonito gesto que demuestra una vez más la cálida y cercana relación de nuestros Hermanísimos de esta semana.