Tras la muerte de la Reina Isabel se realizó un acto de proclamación del Rey Carlos III para que pudiera comenzar a ejercer sus funciones de monarca en Reino Unido tras la muerte de su madre pero ahora le queda el gran acto de coronación como Rey de Inglaterra. Pues bien, ya se están conociendo los primeros detalles de la misma y, lo que queda claro, es que tendrá lugar en el año 2023.
Un año después de la muerte de la Reina Isabel II llegará el momento de la coronación del Rey Carlos III y desde el periódico The Sun han dicho lo siguiente: "No hay ninguna prisa para la coronación y antes hay mucha planificación por hacer, pero acabará siendo en mayo o junio, dependiendo de lo que vaya ocurriendo en el mundo". Esta información abre la posibilidad de que la coronación se celebre el mismo día que la de su madre, pues tuvo lugar el 2 de junio de 1953.
Otra posibilidad sería que esta coronación se celebrase el día 10 de junio, nacimiento del Duque de Edimburgo, convirtiéndose así en un homenaje a su padre. Por el momento no se han puesto a estudiar todos los detalles pues el protocolo de la Corona considera que es una falta de respeto a la Reina Isabel II recién fallecida. Mayo o junio será el mes escogido y, según The Mirror, la abadía de Westminster podría ser el lugar escogido siguiendo con la tradición.
El cómico inconveniente
Como cualquier acontecimiento relevante, puede contar con algún que otro inconveniente y desde ya mismo hay uno de lo más curioso. El Duque de Norfolk, Edward Fitzalan-Howard, tiene prohibido conducir durante seis meses y es una noticia relevante porque ha sido el encargado de la apertura del Parlamento y de los funerales de Estado, siendo el último el de la Reina Isabel II.
Ahora, la coronación de Carlos III también recae en sus manos y el Duque considera que necesita el permiso de conducir para poder organizarla. La Justicia le deniega ese permiso porque ha cometido más infracciones a lo largo de su vida y consideran que no es oportuno solucionar este inconveniente. La letrada del Duque le ha pedido a la jueza que tenga en cuenta el alto rango de su cliente pero esta considera que no es una situación excepcional. Sin duda, una situación de lo más curiosa.