A ello se unía un mensaje de la propia Princesa de Gales en el que agradecía el apoyo recibido durante los dos meses que ha pasado retirada debido a su operación y su larga baja: "Gracias por sus amables deseos y continuo apoyo durante los últimos dos meses".
Se acababan por fin las especulaciones y todo parecía ir bien, pero resulta que no, nada iba bien. El motivo fue que analizando esa imagen se notaba que algo fallaba. No era que se viera un jardín que pudiera parecer de otra época del año o que Kate Middleton no llevara su anillo de compromiso, sino que la foto parecía estar manipulada. Tanto es así que las agencias Reuters, AP, Getty y AFP retiraron la foto ante el temor de haber sido manipulada.
Entre los errores destacaban fallos en la falda de la Princesa Charlotte o la cremallera de la Princesa de Gales, lo que daba la sensación de que la foto había sido retocada digitalmente. ¿El motivo? No se entiende, más cuando la imagen era perfecta para acabar con los rumores, y ha provocado el efecto contrario.
Mientras tanto, Kensington Palace mantiene la imagen en sus redes sociales y publicó una disculpa de Kate Middleton en la que dijo que había "experimentado con la edición". Lo que está claro es que si pretendían acabar con las habladurías, han logrado el efecto contrario.