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El Príncipe Guillermo y Kate Middleton felicitan la Navidad 2015 con sus hijos Jorge y CarlotaNo hay nada más bonito en la vida que tener un hijo, aunque nadie dijo que la tarea fuera fácil por mucha ayuda que tengas para criar a uno, dos o los niños que sean. El Príncipe Guillermo tiene dos vástagos, el Príncipe Jorge, que tiene 2 años y medio, y la Princesa Carlota, que en mayo cumplirá su primer año de vida. Para encargarse de los pequeños no está solo, pues cuenta con la madre de las criaturas, Kate Middleton, con la niñera María Teresa Turrión Borrallo, más con todo el personal que tiene a su servicio en Anmer Hall.
El Duque de Cambridge ha comentado cómo está llevando la paternidad y cómo son sus hijos. El nieto de la Reina Isabel II participó en la recepción previa al partido del torneo de rugby Seis Naciones que jugaron Gales y Francia. Allí fue donde se soltó a la hora de hacer comentarios sobre sus pequeños.
La Princesa Carlota de Cambrigde muy sonriente jugando con un oso de pelucheLa Princesa Carlota sigue portándose bien, y parece ser una niña muy dulce, pero lo cierto es que a veces sigue los pasos de su revoltoso hermano mayor: " No se han roto ningún hueso todavía, pero lo intentan a cada momento", comentó el hijo mayor del Príncipe de Gales.
La niña ha salido tan dulce como su madre, pero le da miedo cuando llegue a los 9 o 10 años, que es cuando le han dicho que empezará a dar problemas. Quien ya es todo un trasto sin cumplir tantos años es el Príncipe Jorge, que es un terremoto que tiene locos a todos los habitantes de Anmer Hall. ya que no para quieto ni un momento.
El Príncipe Guillermo escalando en GalesCríticas al Príncipe Guillermo por dejadez de funciones institucionales
Es lógico entonces que el Príncipe Guillermo esté bastante cansado entre sus compromisos familiares, su trabajo como piloto de ambulancias aéreas y los actos institucionales con los que debe cumplir como miembro de la Familia Real Británica. Precisamente se ha convertido en el centro de la polémica muy a su pesar después de haber sido criticado por su descendente labor institucional.
