-
Raúl Rodríguez y Silvia Taulés nos cuentan su papel en 'La familia de la tele'
-
Kiko Matamoros y Lydia Lozano: "Nuestro público es de todas las edades y RTVE tiene un público muy pegado a las novelas, al que tenemos que captar"
-
Carlota Corredera y Javier de Hoyos: "La tele tiene que representar al público también y aquí están todos los perfiles posibles&quo;
-
Así se tomó Felipe VI que la Infanta Sofía no quisiera recibir formación militar
-
Belén Esteban: "Estoy emocionada, muy contenta y muy feliz por llegar a RTVE"
-
Manu Baqueiro: "Tuve como referente a Bruce Willis en 'Luz de Luna' para mi trabajo en la serie 'Perdiendo el juicio'"
-
Magdalena de Suecia responde a las críticas y explica por qué le han permitido lanzar su propio negocio
Tras pasar unas vacaciones maravillosas en México con Sheila, Christian y Óscar, tres de sus cuatro hermanos, Mario Casas regresó a España para pasar tan solo unos días en la península ibérica. Libre de compromisos y aprovechando el verano, el actor voló a Ibiza para pasar unas vacaciones, esta vez con sus amigos.
El grupo disfrutó de una jornada de navegación a bordo de un barco en el que no faltaron baños de sol, risas, diversión y por supuesto chapuzones. El protagonista de 'Palmeras en la nieve' se subió a un acantilado para tirarse desde allí, y después subir al barco para seguir allí la fiesta.
Mario Casas lució cuerpazo en bañador, además de un intenso moreno conseguido también gracias a su estancia en México. Desde allí, tanto él como sus hermanos regalaron posados en los que mostraron el buen tipo que se gastan los Casas.
Pilla a los paparazzi
En Ibiza nuevamente presumió de torso desnudo con un cuerpazo en el que ya no están los 15 kilos que tuvo que coger por exigencias del guion, ya que su papel en la película 'Bajo la piel del lobo' así se lo demandó.
Después de tanto sol y tanta sal, los amigos acudieron a un local de ocio en el que fumaron una cachimba y tomaron algo. Mario Casas habló con una mujer, momento en el que descubrió a los paparazzi, a los que señaló. Seguro que no le hizo ninguna gracia, pero ya era tarde...


