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Así es la vida de Iñaki Urdangarín en Ginebra: un amo de casa que se queja de que ya no tiene servicio

El exjugador de balonmano lleva una vida que no tiene nada que ver con el pasado, cuando todo era felicidad y era el yerno y cuñado favorito.

Bekia 28 Febrero 2017 en Bekia

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La vida de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarín ha cambiado mucho, y a peor desde que estalló el Caso Nóos. Si ya en el 'exilio' en Washington no estaban especialmente a gusto y añoraban los buenos años en Barcelona, el regreso a la ciudad condal fue todo un infierno. El cambio a Ginebra les hizo mejorar, y aunque están más tranquilos, echan de menos todo aquello que tenían antes y que nunca volverá debido a sus comportamientos poco ejemplares en el caso de ambos, y delictivos en el de él, como ha dejado claro la sentencia de Nóos.

Las medidas cautelares dictadas contra Urdangarín por el tribunal que le juzgó han sido benignas, ya que puede seguir residiendo en Ginebra. Allí su vida no tiene mucha emoción, pero al menos está tranquilo y con su familia al lado. Ahora y desde que se instaló en Suiza, su existencia se reduce a cuidar de su casa y sus hijos, algo que le gusta, pero que no le llena en comparación con todo lo que vivió en el pasado.

Un amo de casa simpático con los vecinos

Como señala Vanitatis a través de Pepe del Real, en Ginebra, el cuñado del Rey suele ser visto con las bolsas de la compra, andando o sacándolas del coche, ese Volvo que usa para sus desplazamientos por la zona. A veces compra cerca de casa, y otras cruza la frontera y lo hace en Francia, donde los precios son mucho más bajos que en la carísima Suiza. La última vez que lo hizo fue el miércoles 22 de febrero, el día anterior a la vistilla, para que los niños estuvieran bien atendidos en su ausencia.

Pese a todo, parece que en Ginebra es razonablemente feliz. Los vecinos de la zona, que saben que son de la realeza, le ven como alguien cercano, e incluso habla con algunos españoles que viven por allí. La Infanta Cristina siempre ha sido más distante, pero el citado medio asegura que desde hace un tiempo es mucho más simpática con la gente.

Por otro lado, en sus conversaciones, Iñaki Urdangarín no habla de sus problemas judiciales, pero sí cuenta anécdotas de su vida, cuando todo iba bien. También comenta que ya no tienen servicio interno en casa, como antes, y que viven con mucho menos y que van justos a fin de mes, o al menos justos en comparación con el pasado, cuando vivían a cuerpo de reyes.

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