Valeria Mazza: la transformación de una supermodelo en mamá, empresaria y celebrity

Nacida el 17 de febrero de 1972 en Rosario, Argentina, Valeria Raquel Mazza nació para triunfar. Con tan solo 14 añitos fue descubierta por el diseñador Roberto Giordano. Él vio que esa jovencita tenía algo, que podía lanzar a esa adolescente al estrellato y así fue. La modelo se mudó de Paraná, donde creció, a Buenos Aires y allí comenzó el principio de una grandísima carrera.

En 1989 empezó sus estudios de Terapia Ocupacional al tiempo que empezaba su carrera. Entonces empezó a participar en diseñadores argentinos hasta que dio el gran salto a Estados Unidos al protagonizar, junto a Tyra Banks, en 1996 la portada de Sports Illustrated. Esa impresionante portada en bikini marcó el antes y el después en su vida de forma definitiva.

Su teléfono no dejaba de sonar y consiguió trabajar con las mejores marcas del mundo. Diarios de todo el mundo incluyeron a la nueva promesa del mundo de la moda dentro de las mujeres más sexys del año y contaron con ella marcas de renombre como Versace, Dior, Valentino, Dolce & Gabbana, Ralph Lauren o Armani.

Valeria Mazza desfiló en el Victoria Secret Fashion Show

No había pasarela a la que no se subiera Valeria Mazza, que se convirtió también en modelo fija de las publicaciones más prestigiosas del mundo de la moda -ha protagonizado cerca de 400 portadas a lo largo de toda su trayectoria-. Por supuesto no podía faltar tampoco en el desfile de lencería más esperado de cada año: el Victoria's Secret Fashion Show.

El 3 de febrero de 1998 la modelo se convirtió en la primera argentina en pisar la prestigiosa pasarela en un desfile en el que también participaron Naomi Campbell, Laetitia Casta, Heidi Klum, Eugenia Silva o Tyra Banks. Allí no estuvo Claudia Schiffer, su gran rival en aquella época por ser la modelo con más proyección cada año.

Una competencia de la que mucho se habló en los medios de comunicación pero que, para las implicadas, nunca fue tal. Aunque eso sí, Valeria Mazza confesó durante una entrevista a TV Show que en principio sí hubo tensión que supieron superar, pero que nunca fueron amigas, tan solo compañeras de trabajo: " Claudia ya era Claudia cuando yo empecé. Hubo momentos de tensión, pero todo pasó. Después aprendimos a convivir y yo hice mi carrera. Trabajamos mucho juntas y nunca hablamos de ellos porque nunca fue mi amiga, solo compañeras de trabajo ".

Y es que ya sabe que en el mundo de la moda y de estar en primera plana cada año hay más competencia y hay que luchar por seguir en lo más alto. Algo que Valeria Mazza compaginó con una carrera paralela como presentadora, encargándose de conducir la 46º edición del Festival de la Canción de San Remo o de algunos programas musicales de la MTV, así como del show musical 'Esta noche invito yo' en la cadena argentina Telefe.

Nunca se bajó oficialmente de la pasarela

Una carrera frenética que decidió empezar a rebajar el día que dio el 'sí quiero' al empresario Alejandro Gravier tras ocho años de noviazgo. La pareja contrajo matrimonio primero por lo civil en una impresionante boda en Bella Vista a la que la modelo llegó en helicóptero. Una semana después se convirtieron en marido y mujer en una impresionante ceremonia en la Iglesia Santísimo Sacramento de San Martín.

Rápidamente decidieron formar una gran familia: el 29 de mayo de 1999 nació Balthazar, y después llegarían Tiziano (12 de marzo de 2002), Benicio (23 de febrero de 2005) y Taína (22 de abril de 2008). Tras el nacimiento de su cuarto hijo, la primera niña, Valeria Mazza comentó que nunca se ha retirado de las pasarelas pero que no volvería a subirse a menos que fuera para hacerle algún favor a algún amigo o por alguna causa solidaria: "Nunca me he ido, pero cuando tienes hijos bajas el ritmo. Ellos son los que nos marcan el camino".

De hecho en el año 2007 fue la encargada de amadrinar el primer desfile contra la anorexia organizado en Milán. Y uno de sus últimos trabajos como imagen de firma ha sido junto a la marca chilena Falabella, con la que empezó a colaborar en el año 2001; junto a ellos también se lanzó al mundo del diseño lanzando su propia colección de ropa.

Su familia, su prioridad

Por tanto, aunque ya no luce tipazo sobre la pasarela, Valeria Mazza nunca se ha desvinculado del mundo de la moda. Así, además de acudir al front row de las Semanas de la Moda -la de Milán no se la suele perder edición tras edición-, la top de los 90 se ha convertido en una gran empresaria del mundo de la moda y la belleza. Probó suerte como diseñadora y triunfa con su línea de perfumes VM Beauty, su marca de gafas Valeria Mazza Eyewear y su revista Valeria Mag. Con sus productos ha llegado a los mercados de Estados Unidos, Francia, Italia, Alemania y también España.

Esa es su principal ocupación además de ejercer de mamá, algo que le apasiona. Siempre ha asegurado que le encanta tener todo controlado en su casa y ser la encargada de la organización del día a día: " A mí me encanta ir al supermercado, me gusta cocinar, me gusta ordenar. Mi casa la manejo yo ", contestó a Clarín cuando le preguntaron por ello al tiempo que confesó que, evidentemente, cuenta con ayuda externa: " Obviamente tengo gente que me ayuda y tengo niñera, pero no por eso la responsabilidad de tus hijos se la vas a pasar a otro".

Así es Valeria Mazza, una mujer que se ha sabido reinventar con el paso del tiempo. Una mujer que estuvo en lo más alto y que decidió ir poco a poco bajándose para formar una gran y feliz familia. Una familia que está más que unida y que nunca se separa. Al mismo tiempo la gran top de los años 90 ha sabido formarse una carrera como empresaria en la que sacar lo de mejor de sí y aprovechar lo mucho que aprendió tanto sobre las pasarelas como en el backstage o las sesiones de fotos para publicaciones y campañas publicitarias.

"De chica no soñaba con hacer esto, pero la profesión me encontró y me gustó. Obviamente la carrera de modelo tiene un tiempo bastante limitado, como la de un deportista. Fui abriéndome nuevas puestas con las posibilidades que me dio haber hecho la carrera que hice y tener un nombre. Hoy la mayor parte de las cosas las genero yo, soy una empresa ". Así describía la propia Valeria Mazza cómo ha pasado el tiempo para ella.