Desde que se estrenara en marzo de 2019 el documental 'Leaving Neverland', que acusa al cantante de abusos sexuales, las noticias en torno a Michael Jackson no han dejado de sucederse. La última en airear más trapos sucios del artista ha sido su segunda mujer, Debbie Rowe.
En una entrevista realizada tras la muerte del cantante ya admitió que nunca mantuvo relaciones sexuales con Jackson y que sus dos hijos, Prince y Paris, fueron fruto de una inseminación artificial. Ahora, Rowe declara que el rey del pop no es el padre biológico de los niños.
Paris y Prince Jackson en el evento 'Michael Jackson Diamond'Lo cierto es que los rumores de paternidad del cantante son algo que le ha acompañado muchos años debido a que no guardase ningún parecido con los pequeños. Rowe lo confirma y reconoce que acudieron a un donante de esperma porque el cantante estaba obsesionado con ser padre : "Le ofrecí mi vientre, fue un regalo. Fue algo que hice para que fuera feliz", confiesa.
Su historia
Michael Jackson durante un concierto de su 'Dangerous World Tour' en 1992Aunque tras la separación Rowe renunciara al derecho sobre los pequeños y Jackson consiguiera quedarse con la custodia total, al morir el cantante trató de recuperarlos y comenzó una batalla judicial con la madre de Jackson, Katherine Jackson, quien adquiría ahora la custodia tal y como pedía el testamento del artista. Finalmente, Katherine y Rowe llegaron a un acuerdo: los niños seguirían bajo la tutela de su abuela, pero su madre tendría derecho a visitarlos.
Poco se sabe del tercer hijo del artista, Blanket, que llegó a su vida cuando él ya se había separado de Rowe y no se sabe quien es la madre y si el esperma utilizado fue el de Jackson o no.
