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El mundo se paró para Lourdes Montes cuando el pasado lunes 10 de agosto recibió una llamada en la que le informaron de la grave cogida que había sufrido su marido, Fran Rivera, en la plaza de toros de Huesca, que casi le cuesta la vida.
Casi con lo puesto, la abogada cogió un AVE acompañada por su cuñado Cayetano y viajó a Zaragoza, donde estuvo ingresado el torero tras ser trasladado desde Huesca. Allí permaneció a su lado hasta que decidió que era el momento de regresar a Sevilla para preparar el nacimiento de su hija Carmen, y es que Lourdes Montes sale de cuentas el 20 de agosto.
A pesar de la negativa de los médicos, Francisco Rivera Ordóñez consiguió que dieran su brazo a torcer, y han dado el visto bueno para que siga su tratamiento y su recuperación en el hospital Sagrado Corazón de Sevilla.
Lourdes Montes pasea con su abuela
Ante esta buena noticia, Lourdes Montes se encuentra mucho más relajada y tranquila. Desde el primer momento, la diseñadora ha contado con el apoyo y el ánimo de toda su familia en el trance que le ha tocado vivir. Por eso, tras dejar a Francisco ya en manos del Doctor Salvador Morales, Montes aprovechó para dar un paseo por las calles de Sevilla acompañada de su abuela.
Así se ve a una joven premamá muy tierna, con ganas ya de tener a su pequeña entre sus brazos. Feliz, la abuela, que se convertirá tras la llegada de Carmen, en bisabuela. Con un floreado vestido ancho y unos zuecos, que le daban un look muy hippie,
la abogada ha lucido su embarazo sin perder su estilo.




