Este nuevo proyecto es algo muy familiar para el portugués. Por un lado, Georgina Rodríguez será una de las encargadas. La modelo estará al frente de todo lo relativo con la administración de la clínica y también se encargará de su gestión. Por otro lado, el motivo que le llevó a Cristiano Ronaldo a trabajar en este proyecto fue un trasplante de cejas que tuvo que hacerse su madre, Dolores Aveiro. El futbolista quedó impresionado con este trabajo y comenzó a interesarse por el mundo capilar.
La clínica de Madrid cuenta con 2.500 metros cuadrados divididos en seis plantas. Sus tratamientos, que duran unas seis horas, se basan en injertar unos 10.000 cabellos en las zonas donde el paciente tenga alopecia por un precio que oscila entre los 4.000 y 7.000 euros. El equipo de esta clínica, que estará compuesto por 150 sanitarios (30 médicos y 120 enfermeros), pretende realizar unas 450 cirugías al mes en sus 18 quirófanos.
Ana Rosa Quintana, en contra
Ana Rosa Quintana ha dejado claro que no tiene nada en contra de los centros de trasplante capilar, pero que considera agresiva la publicidad que se ha realizado de este en concreto. Ni tampoco contra uno de los objetivos del portugués que es reducir el número de calvos en España. Eso sí, ha dejado bien clarito que ella está encantada con el físico de su marido, el empresario Juan Muñoz, que tiene alopecia.