"Que se cuestionara mi conducta en mi puesto de trabajo fue algo desagarrador", describía el productor en la columna, "siempre he tratado a todos mis compañeros con honestidad, respeto, amabilidad y compasión", reconocía en el escrito. Él siempre se ha descrito como una persona partícipe del cambio y que fomenta el progreso, tanto en lo personal como en lo profesional, es por eso por lo que no acaba de entender estas acusaciones.
A pesar de todo, ha querido disculparse con esta mujer de la que se desconoce su nombre, por si en algún momento tuvo alguna actitud que no le sentara del todo bien. Seacrest ha alegado que en sus 25 años de trabajo en la industria, la mayoría de sus compañeros han sido mujeres y que nunca ha recibido ninguna queja por parte de ellas. "Me gusta fomentar un ambiente de trabajo basado en el mutuo respeto y en la cortesía", reconocía.
"Estoy orgulloso de mi reputación en mi puesto de trabajo", confesaba, "y confío que mi trayectoria hable por sí sola". A día de hoy, las pruebas que se han presentado no son concluyentes y ni suficientes para sustentar una acusación contra su persona pero, aún así, se seguirá investigando por si hubiera algo turbio en su pasado.
La acusación
El pasado noviembre Ryan Seacrest recibía una carta por parte de su representante legal en la que una estilista suya le acusaba de acoso sexual. La acusación alegaba que el productor de televisión le habría acosado sexualmente hace una década, cuando compartían puesto de trabajo. A pesar de haber sido muchas y muy intensas las investigaciones que se han realizado en torno a su figura, las evidencias que han salido a la luz son insuficientes para poder sostener las acusaciones de la mujer.