La docu-serie de Rocío Carrasco se acerca poco a poco a su final y sigue mostrando el impactante testimonio de la hija de Rocío Jurado, que ha experimentado un brutal sufrimiento a lo largo de toda su vida adulta. Rocío Carrasco tiene claro quién es el culpable de todos sus males, Antonio David Flores, y tiene todavía más claro que se tiene que hacer justicia.
Rocío Carrasco acompañada de su abogado en la entrada de los JuzgadosEn el adelanto del penúltimo capítulo de 'Rocío, contar la verdad para seguir viva', el número 11, habla sobre el periodo que va de diciembre de 2016 a agosto de 2019, donde el tema protagonista en la guerra que mantiene en los juzgados con Antonio David Flores. En ese sentido, ha señalado que siente que la justicia se pondrá de su parte: "Estoy convencida de que se hará justicia".
"Muchos juristas de este país me habían dicho tienes toda la razón. Pero nunca antes ha sucedido, no existe un precedente", explicó Rocío Carrasco, que ha dejado claro que si bien no ha conseguido que su exmarido sea condenado, la guerra no ha terminado: "Para que uno sea absuelto tiene que haber sido juzgado. Todavía no es un caso cerrado y estoy convencida de que se hará justicia ".
La querella de Rocío Carrasco a Antonio David Flores
Por otro lado, Rocío Carrasco responde cuando escucha a Antonio David Flores decir que ha estado dos años y medio sin trabajar y que por tanto es insolvente y no se le puede reclamar un dinero que no tiene. La hija de Rocío Jurado dice ser consciente de que miente y que no ha logrado encontrar esos dos años y medio sin trabajar de los que habla el padre de sus hijos.
Antonio David Flores a la salida de un juzgado" La mayoría de las cantidades no las cobraba él sino sociedades a las que él ni pertenece y decidimos poner esa querella", manifestó Rocío Jurado en relación a un dinero que según ella sí que ganó y sí que tiene, lo que podría derivar en un delito de alzamiento de bienes. Preguntada sobre si Antonio David Flores podría ir a la cárcel, Rocío Carrasco ha sido rotunda y contundente: "Sí".
