En el programa de 'Última hora de Supervivientes', salieron a la luz imágenes inéditas que no se vieron durante la gala 'Conexión Honduras' y dejaron claro que el ambiente entre los concursantes está más tenso que nunca. Anita y Montoya protagonizaron fuertes discusiones con el resto del grupo y la cosa no terminó cuando se apagaron las cámaras. "Ahora resulta que esto es la mayoría, no pasa nada, ahora estamos de acuerdo, mañana no", se quejaba Montoya, molesto con sus compañeros. Pero además de enfados, tras las cámaras se vieron muchas lágrimas, en especial de Pelayo.

Uno de los momentos más intensos lo protagonizó Damián, quien no pudo contenerse ante la actitud de Anita. "¿Tú eres consciente de que estamos hartos de tus formas y de cómo obras? Ya estamos hartos de intentar hablar contigo de una forma correcta y educada cuando tú no lo haces nunca", le soltó. Más tarde, Montoya reflexionaba con Anita: "¡Madre mía! Lo que cambia aquí la gente. ¿Una reunión para qué? Si al segundo hay otra cosa".
Pero sin duda, el golpe más fuerte de la noche fue la expulsión sorpresa de Damián. Nadie se lo esperaba, y menos Pelayo, que tenía con él una relación muy especial. El público decidió salvar a Álex, a pesar de su reciente lesión, y el deportista olímpico tuvo que abandonar la isla para siempre. Su salida dejó al grupo completamente descolocado, especialmente porque era uno de los favoritos.
La expulsión de Damián destroza a Pelayo
Pelayo no pudo contener la emoción al ver partir a su amigo del alma. "No, no me he quedado solito, pero él era mi otra mitad aquí, mi hermano ", confesaba entre lágrimas mientras Makoke intentaba consolarlo. "No me puedo creer que hayamos ido a pescar por última vez. No voy a volver a dar más paseos con él", decía.

Aunque intentaba mantenerse firme, Pelayo no lograba superar la expulsión. "Estoy en shock ", repetía. A pesar de saber que Damián se marchaba feliz, ilusionado por reencontrarse con su mujer y su bebé, el vacío que dejaba en la isla era inmenso. Makoke le recordaba que estaban cerca del final, tratando de animarlo, pero él solo podía pensar en los momentos compartidos.