El pasado viernes 27 de junio, Marta López vivió uno de los días más importantes de su vida al casarse con Alejandro Huerta, fisioterapeuta vinculado a la Casa Real. Belén Rodríguez, quien no acudió al enlace, ha hecho públicas en el programa 'Tardear' las duras críticas que ha recibido de parte de compañeros que sí estuvieron presentes. " Si yo fuera Marta, no volvería a fiarme de ellos ", afirmó la colaboradora. Según sus palabras, algunos invitados comentaron en privado que " la corvina estaba dura, la comida era escasa y el sitio parecía una nave industrial ".

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Mientras unos cuestionan aspectos básicos de la organización, otros han salido en defensa del evento. Paloma Barrientos, periodista con experiencia en eventos de alto perfil, desmintió que el lugar elegido, la finca El Mirador de Cuatro Vientos, en Madrid, pueda parecer una nave industrial. "Es uno de los sitios más bonitos y cuidados que hay en la zona", aseguró. Por su parte, Miguel Ángel Nicolás aportó su testimonio directo como invitado: " Había comida para un regimiento. Fueron cuatro horas de cóctel, ¡acabamos deseando pasar al salón!".
Además del banquete y el lugar, el vestido de Marta López también ha generado controversia. En la portada de Lecturas, donde posa junto a su marido, la colaboradora luce un diseño de manga larga con pedrería en los hombros, una elección que no ha sido del gusto de todos. La diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada, fue crítica con el estilismo : "Con ese calor, la manga larga no es apropiada, y la pedrería le resta elegancia ", opinó. Marta, respondió con firmeza al comentario: "La tela buena no te hace pasar calor".
Marta López responde con elegancia a las críticas
Marta López ha optado por restar importancia a las críticas, confiando en su vivencia personal del evento. Este lunes, tras hacerse pública la portada de Lecturas, Marta apareció en 'Tardear'. "Fue una fiesta muy bonita, estábamos celebrando el amor. Las pegas las pondrán ellos, porque para mí fue un día inolvidable ", expresó. Su aparición televisiva fue una muestra clara de que no piensa dejarse afectar por comentarios malintencionados.

Según Socialité, la pareja firmó un acuerdo de 40.000 euros con la revista Lecturas para cubrir el enlace. Aunque la protagonista insiste en que se queda con lo positivo, lo cierto es que esta situación ha revelado grietas entre compañeros, algunas más profundas de lo que parece. Como bien advirtió Belén Ro: "Yo si fuera Marta, no volvería a confiar en todos los que estuvieron allí".