El Rey Juan Carlos y Corinna zu Sayn-WittgensteinLa relación del Rey Juan Carlos I con la princesa alemana Corinna zu Sayn-Wittgenstein era ya demasiado pública como para no afectar a la Monarquía Española. Por eso, y aunque en un principio se especulaba con que don Juan Carlos no cambiaría sus hábitos, la periodista Pilar Eyre asegura hoy que la estrecha amistad entre el Rey y Corinna ha terminado.
Para escenificar la ruptura, la princesa Corinna se ha trasladado a vivir a Montecarlo, donde ha contratado los servicios del prestigioso abogado Matthias Prinz, al que ha ordenado la labor de rastrear todo lo que se dice de ella en la prensa para mantener su honor. Corinna estaría especialmente preocupada por lo que se comenta sobre su persona en la prensa de su país, Alemania, donde su supuesto romance con el Rey de España llegó incluso a la portada del diario Bild.
La ruptura no significa un acercamiento a Sofía
Al parecer, el Rey ha antepuesto su sentido de estado a sus intereses personales para hacer efectiva esta ruptura después de que saltara el escándalo cuando se rompió la cadera cazando elefantes con Corinna en Botswana. Eyre asegura que para Juan Carlos " España está por encima de todo ". El monarca está "sereno", espera que pase el temporal y no tiene ninguna intención de abdicar.
Corinna zu Sayn-Wittgenstein con el Rey Juan Carlos junto al diseñador de joyas Patrick MavrosEso sí, la ruptura con Corinna no significa que el Rey vaya a escenificar un aciercamiento con su esposa, la Reina Sofía. La pareja mantiene su intención de no celebrar ningún acto público con motivo de sus bodas de oro.
Precisamente ha sido la Reina Sofía el único miembro de la Familia Real en acompañar a su hija y yerno tras la muerte de Juan Mari Urdangarín, padre de Iñaki Urdangarín. La Reina Sofía ha viajado hasta Vitoria con el fin de asistir al funeral. Espera hacerlo de manera discreta, sin ser fotografiada en la semana en la que se ha sabido que la Casa Real cuenta con que Iñaki Urdangarín pudiera ingresar en prisión.
