Tras la salida de Samantha Cohen y de Melissa Touabti, ahora es Amy Pickerill la que dejará de prestar sus servicios a la Duquesa de Sussex.
Después de una etapa de relativa calma en la vida de Meghan Markle, vuelven las fugas dentro de su equipo de trabajo. Ahora es Amy Pickerill la que ha decidido abandonar su puesto como ayudante de la Duquesa de Sussex, un puesto que antaño podía ser muy goloso e interesante, pero que parece no serlo tanto.
Como señala Daily Mail, la marcha de Amy Pickerill tendría lugar una vez que los Duques de Sussex abandonen Kensington Palace y se muden a Frogmore Cottage, en Windsor, un traslado que podría ser en marzo, pero que no ha sido todavía confirmado oficialmente.Además, Amy Pickerill querría esperar a que nazca el primer hijo o hija de la pareja, ya que ha tejido una amistad con Meghan Markle y no quiere marcharse antes de que se produzca el alumbramiento. Eso sí, tiene tanto estrés que no ha querido seguir adelante con un trabajo con enorme responsabilidad. En unos meses, la tarea recaerá en otra persona.
Melissa Touabti, fichada por la familia Livingstone
Por otro lado, Melissa Touabti, otra ayudante de Meghan Markle que no pudo soportar la presión, ha encontrado otro puesto de trabajo. Touabti ha sido contratada por Natalie y Richard Livingstone, una pareja de millonario que tienen como propiedad Cliveden House, casualmente el lugar en el que la Duquesa de Sussex y su madre pasaron la noche antes de la boda real. Se supone que en el momento en el que gestionó la estancia de Meghan Markle en Cliveden House conoció a los Livingstone, y siendo de sobra conocida la competencia de Melissa Touabti, es posible que fuera tentada para dejar Kensington Palace para incorporarse a su equipo, que es lo que ha terminado pasando.