El actor se ha granjeado críticas por los tratos de favor que recibiría en su Málaga natal.
Antonio Banderas es un acto muy querido en su Málaga natal y en toda España. Ha llevado a nuestro país por todo el mundo, y cuenta con una excelente imagen pública que ya quisieran para sí otros artistas. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce, y concretamente en su ciudad, hay algunas voces que saltan contra él.
El protagonista de 'La máscara del Zorro' viajó a Málaga para recibir la Biznaga de Honor del Festival de Cine de la citada ciudad. Una vez allí, se ha quedado para prepararse para la Semana Santa, que ya está al caer. Eso sí, se va a tomar las cosas con más calma debido a sus problemas de corazón, esos que tantos disgustos le han causado y que le han hecho replantearse la vida.Precisamente su participación en la Semana Santa es objeto de comentario debido al trato de favor que se le dispensa. Como comenta Informalia, algunos cofrades malagueños están descontentos con que no se aplique con él y con los demás sí el reglamento de las cofradías, en el que se señala que un hermano mayor o cofrade con un puesto de importante no puede estar divorciado.
En el caso de Antonio Banderas, se ha divorciado no una, sino dos veces, sin embargo en esta Semana Santa que ya casi está aquí ejercerá de mayordomo de trono de la Hermandad Lágrimas y favores. Por su parte, Juan Partal, hermano mayor de El Cautivo de Málaga, no tuvo la misma suerte, y en 2014 se vio obligado a dimitir por presiones del Obispado, que le forzó a dejar su puesto debido a la disolución de su matrimonio. Quizás la solución sea que se permita la presencia sea cual sea el estado civil del susodicho.
El cubo de la discordia
Por otro lado, los vecinos de la comunidad en la que Banderas tiene un ático dúplex de 500 metros cuadrados con vista a la Alcazaba, han protestado porque el actor ha colocado en la azotea, propiedad de la comunidad y prestada al artista por obra y gracia del presidente, un cubo de colores. El malagueño quería hacer un guiño al Museo Pompidou de la ciudad, pero los vecinos no están conformes. Por su parte, el ayuntamiento dice que todo es legal.