La modelo ha vuelto a hacerlo a lo grande para sorprender a todos sus fans en una fiesta única en la que es anfitriona.
Heidi Klum un año más ha decidido sorprender a sus invitados en su increíble fiesta de disfraces de Halloween. La modelo lo celebró en Nueva York, e hizo una entrada triunfal a la gala 20th Annual Halloween Bash. Rodeada de flashes, ninguno de los presentes se esperaba cuál iba a ser su transformación para esta ocasión.
Klum consiguió impactar a los presentes con un disfraz de alienígena prácticamente desnuda, es más, llevaba su 'cerebro' al descubierto. Lo único reconocible de la modelo son sus ojos, algo que sigue recordando a un humano en cierto modo. Ella misma ha dicho cuál fue su idea, y quería plasmar un experimento que salió terriblemente mal en el espacio. El proceso de creación del disfraz fue muy largo, aunque ella ya está acostumbrada. Más de diez horas fueron necesarias para todo el maquillaje que las prótesis de su cuerpo necesitaron. Por otro lado, consiguió dejar imágenes muy divertidas durante la hora de la comida, comiendo espaguetis con el disfraz a medio hacer. Ella misma ha querido publicar el proceso al completo en su cuenta de Instagram sin dejarse ni un solo detalle.
La aparición en la fiesta no la hizo sola, sino que con ella estuvo su marido, el cantante Tom Kualitz, que se disfrazó de astronauta repleto de sangre con un traje espacial, muy acorde al disfraz que su mujer eligió. Todo parece indicar que la idea que querían transmitir es de un alienígena que ha atacado a un astronauta. Creando cada año mucha expectación
En 2018 la modelo apostó por un disfraz completamente distinto, puesto que se disfrazó de Fiona, la novia de Shrek. "Halloween ya casi está aquí", escribió en las redes sociales. 'Si estás en Nueva York, ¡únete a mí mañana en la tienda @amazon en 7 West 34th Street para verme transformarme en vivo en un _______! (¿Alguna suposición?)", escribió semanas antes en sus redes sociales mientras se preparaba para la fiesta.