Jason Alexander se declara inocente de todos los cargos en su contra después de asaltar la casa de su exmujer, Britney Spears, algo que retransmitió en directo a través de las redes.
Jason Alexander, exmarido de Britney Spears, irá a juicio tras cometer un delito grave de acoso, al igual que se enfrentará a otros casos por irrumpir en la casa de la cantante horas antes de darse el 'si, quiero' con Sam Asghari. El juez encargado de caso, David R. Worley, dictaminó en la primer audiencia del juicio que tuvo lugar el día 27 de junio de 2022 que existían las suficientes pruebas para llevar a Jason Alexander a juicio imputado bajos los citados cargos en su contra, tal y como informa el medio de comunicación Associated Press.
Aparte de un delito grave de acoso, Jason Alexander, de 40 años, se enfrenta también a delitos menores de entrada ilegal y de negarse a salir de la propiedad privada de su exmujer, al igual que de vandalismo y agresión. Según el informe redactado en el registro de la Oficina del Sheriff del Condado de Ventura cuando fue arrestado. Un informe que dictaminó una fianza de 100.000 dólares. Por su parte, Jason Alexander se ha declarado inocente de todos los cargos que se le imputan, según la información del medio. Sin embargo, el delito de acoso si se había ocasionado, debido a la orden de alejamiento de tres años que tiene interpuesta Britney Spears en su contra.Una orden de alejamiento que dictamina que Jason Alexander tiene que mantenerse a 100 yardas (91 mentros) de distancia de la cantante. Durante la primera audiencia, varios testigos aseguraron que el exmarido de la cantante intentó romper la puerta de su dormitorio, que estaba cerrado con llave, según el testimonio de Richard N. Eubeler, guarda de seguridad de la cantante, y recogido por la revista Rolling Stone. Según Richard N. Eubeler, este habría sido el segundo intento, con éxito, de Alexander de irrumpir en la vivienda de la cantante.
Otro testigo, el detective del condado de Ventura, Dylan Foley, aseguró ante el tribunal que Britney Spears y Sam Asghari tuvieron que abandonar su casa durante unos momentos tras el arresto de Jason Alexander, el cual supuso para la cantante un gran desajuste emocional. Por su parte, la defensa de Jason argumentó que en ningún momento tuvo la intención de lastimar a su exmujer. "La intención del señor Alexander era hablar con Britney, verificar su bienestar, asegurarse de que esto era lo que realmente quería, no causarle ningún temor", argumentó la defensa.El silencio de Briteny
De momento, la Princesa del Pop ha decidido no pronunciarse al respecto. Todo apunta a que la cantante habría decidido disfrutar de su luna de miel y de su reciente vida de recién casada.