Hacía ya tiempo que el nombre de Amador Mohedano no sonaba por los medios de comunicación. El hermano de Rocío Jurado no puede cobrar ninguna exclusiva porque debe a las arcas del Estado la friolera de 350.000 euros, por lo que cualquier ingreso en su cuenta corriente quedaría embargado automáticamente, y claro, de gratis no se va a dejar caer por ningún plató de televisión.
De este modo, parece que el exmarido de Rosa Benito está intentando poner solución a sus problemas fiscales y, después de varios fracasos en el mundo de los negocios, ha decidido poner a la venta una de las fincas que la más grande le dejó en herencia. Según ha informado la revista Corazón, se trata de Los Naranjos, una propiedad que saldrá a subasta el próximo 10 de diciembre con un precio inicial de 212.869 euros más otros 42.000 de depósito.
Amador Mohedano durante la inauguración de la taberna La Kedá de ChipionaLo cierto es que a Mohedano le vienen persiguiendo los problemas con Hacienda desde hace varios años atrás. Al de Chipiona no se le ocurrió otra cosa que pedir al Ayuntamiento una subvención agrícola para construir el museo dedicado a su hermana, algo que a la casa consistorial todavía le está costando 24.000 euros al mes. La mala gestión de la galería llevó a que Rocío Carrasco se ocupara de él para intentar desvincular el nombre de su madre del de su tío.
Poca visión empresarial
Como se ha mencionado anteriormente, Mohedano acumula una larga lista de fracasos en el mundo de los negocios que no han hecho más que engrosar su lista de deudas. El hermano de Rocío Jurado abrió en su Chipiona natal un local de copas que no le fue muy bien, y poco después volvió a utilizar el nombre de la cantante para intentar hacer dinero, inaugurando así La más grande, una discoteca que tampoco tuvo el éxito que esperaba.
