Galería: Presentación del libro de Aitor Ocio
-
Raúl Rodríguez y Silvia Taulés nos cuentan su papel en 'La familia de la tele'
-
Kiko Matamoros y Lydia Lozano: "Nuestro público es de todas las edades y RTVE tiene un público muy pegado a las novelas, al que tenemos que captar"
-
Carlota Corredera y Javier de Hoyos: "La tele tiene que representar al público también y aquí están todos los perfiles posibles&quo;
-
Así se tomó Felipe VI que la Infanta Sofía no quisiera recibir formación militar
-
Belén Esteban: "Estoy emocionada, muy contenta y muy feliz por llegar a RTVE"
-
Manu Baqueiro: "Tuve como referente a Bruce Willis en 'Luz de Luna' para mi trabajo en la serie 'Perdiendo el juicio'"
-
Magdalena de Suecia responde a las críticas y explica por qué le han permitido lanzar su propio negocio
Aunque Aitor Ocio y su novia Covi Riva viven habitualmente en Bilbao, viajan con frecuencia a Madrid, sobre todo en el caso del exfutbolista. El vasco se escapó a la capital de España con su pareja, y ya que estaban allí, fueron al Madrid Open.
OCio y Riva vieron el partido de semifinales de Rafa Nadal, además de visitar la pista World Padel Tour que se abrió en la Caja Mágica, lugar en el que se celebra cada año el torneo de tenis que tiene lugar a principios de mayo en Madrid.
Buenos amigos
Antes de regresar a Bilbao, ambos quedaron para comer con una pareja de amigos. Este matrimonio no es otro que el que forman Israel Bayón y Cristina Sainz, casados desde hace exactamente un año, y que son muy amigos de Aitor y Covi.
Las dos parejas se saludaron afablemente antes de tomar un almuerzo juntos y ponerse al día, ya que debido a la distancia que existe entre ellos no pueden verse de forma tan habitual como les gustaría a los cuatro amigos.
Aitor Ocio y Covi Riva llevan juntos algo más de un año. A lo largo de este tiempo no se han dejado ver públicamente en numerosas ocasiones, aunque tampoco han vivido su amor en secreto. Asimismo, han querido dejar constancia de viajes en pareja, como los que han realizado a Baleares y a Roma.

