Ricky Rubio ha protagonizado una de las entrevistas más emotivas en 'Lo de Évole', el programa de la Sexta presentado por Jordi Évole. En una conversación profunda y sin filtros, el exjugador de la NBA ha compartido los momentos más duros de su vida, desde el fallecimiento de su madre hasta su lucha con la salud mental. "No quiero ser el foco", ha confesado, asegurando que esta será su última entrevista pública.
La entrevista se grabó en el pabellón de El Masnou, el lugar donde Ricky dio sus primeros pasos en el baloncesto. Allí, el jugador repasó su trayectoria profesional y personal, marcada por una entrada temprana en la élite deportiva. "No tuve adolescencia, ni viaje de fin de curso, ni discotecas", recordó, aludiendo al precio que pagó por debutar en la ACB con solo 14 años. A pesar de los éxitos, Ricky confesó que nunca se sintió suficiente : "Ganar era hacerlo todo bien, perder era hacerlo todo mal".

Uno de los momentos más conmovedores fue cuando habló de su madre, fallecida tras una larga lucha contra el cáncer. "Le detectaron cáncer en 2012 y está tres o cuatro años con tratamientos", explicó. Durante la temporada 2015-2016, Ricky vivió la etapa más dura: "Ella no quería que lo viera, me colgaba porque tenía que vomitar". En 2016, logró viajar desde Estados Unidos para verla. "La vi como nunca, delgada. Me acuerdo que estoy en el viaje de vuelta como, no tengo que coger este vuelo". Finalmente, pudo regresar a España y pasar sus últimas semanas junto a ella : "Creo que me esperó. Si no me llaga a esperar, no me lo perdono nunca".
Ricky Rubio también abordó su retirada temporal del baloncesto en 2023, cuando abandonó la concentración de la Selección Española antes del Mundial. "Una noche en el hotel dije: no quiero seguir, no solo con el baloncesto, con la vida ", confesó. A pesar de tener una familia y un hijo, el peso emocional era enorme. "Hay un momento donde todo te pesa tanto. Parece que me muero y que mi vida no tiene sentido". relató. Fue entonces cuando pidió ayuda y comenzó a priorizar su salud mental.

Además, el jugador habló sobre su paso por la NBA y las presiones del deporte de élite. Reveló que llegó a plantearse medicarse, aunque lo vivía como una derrota personal. También compartió cómo algunos compañeros consumían drogas y cómo aprendió a protegerse emocionalmente en un entorno competitivo. Ricky Rubio relató que, tras tener una entrevista con un periodista y reconocer que estaba pasando por un mal momento, un jugador veterano del equipo rival se le acercó durante un partido y le dio un consejo que nunca olvidaría: "No enseñes en la prensa ningún punto débil tuyo porque van a ir a por ti. Aquí todos somos tiburones y cuando olemos sangre vamos a por ti". Desde entonces, entendió que mostrar vulnerabilidad podía volverse en su contra, y comenzó a ocultar sus emociones para sobrevivir en un entorno donde la fortaleza aparente era casi una exigencia.
"No quiero ser el foco"
Ricky Rubio asegura que esta será su última entrevista pública. "El que quiera saber algo, aquí está todo", dijo. Con esta conversación, el jugador regala su experiencia y deja una reflexión sobre el precio del éxito y la importancia de cuidar su mente. Su testimonio sirve como altavoz para quienes atraviesan momentos difíciles en silencio. En especial, en el mundo deportivo.