En la noche del domingo 29 de junio de 2025, el Real Alcázar de Sevilla se transformó en el escenario de una cena de alto nivel organizada en el marco de la IV Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo (FFD4), impulsada por la ONU. Los Reyes Felipe VI y Letizia ejercieron de anfitriones ante más de cien invitados de alto nivel, entre ellos 35 jefes de Estado, 12 jefes de Gobierno y representantes de organismos multilaterales como la ONU, la Unión Europea o el FMI. La velada, celebrada en el emblemático Patio de las Doncellas, combinó el simbolismo histórico del lugar con una fuerte carga diplomática.
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El momento más esperado de la noche llegó cuando el Rey Felipe VI se dirigió a los presentes con un discurso pronunciado en inglés, que fue ampliamente elogiado por su carga simbólica. En él, el monarca defendió el papel del multilateralismo como vía fundamental para abordar los grandes retos del siglo XXI. Para reforzar su mensaje, citó al filósofo Averroes : "La ignorancia conduce al miedo, el miedo al odio y el odio a la violencia", y al poeta sevillano Antonio Machado, "Hoy es siempre hoy". Felipe VI subrayó que la conferencia debía ser una oportunidad para recuperar la confianza en el sistema internacional y para avanzar en objetivos concretos como la lucha contra el hambre, la pobreza y el cambio climático.
Discurso del Rey en la cena con motivo de la IV Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo, de Naciones UnidasDoña Letizia no pasó desapercibida en esta velada de alto nivel. La Reina rescató de su vestidor un elegante vestido azul con aplicaciones doradas florales de Carolina Herrera New York, una pieza que ya había lucido en 2019 durante una visita de Estado a Argentina. En esta ocasión, el vestido volvió a causar sensación entre los asistentes, gracias a su escote en V, sus lazos en la cintura y una silueta vaporosa. Acompañó su estilismo con unos pendientes pequeños de oro amarillo y su habitual anillo de Coreterno.
El incidente de protocolo de Pedro Sánchez y Begoña Gómez
No todo transcurrió con absoluta perfección durante la recepción oficial. Un pequeño pero llamativo incidente de protocolo protagonizado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su esposa, Begoña Gómez, acaparó titulares. Sánchez cometió un desliz al colocarse entre el Rey Felipe y su esposa, cuando el protocolo establecía que debía situarse junto a la Reina. Un miembro del equipo lo corrigió discretamente. Aunque el Presidente rectificó con naturalidad y una sonrisa, esta no es la primera vez que él y su esposa protagonizan un episodio similar, lo que ha reabierto el debate sobre la preparación protocolaria de la pareja en actos de alta representación institucional.
Antes de la cena, el Rey Felipe mantuvo una intensa jornada de encuentros en el propio Alcázar. A lo largo de la tarde, recibió al secretario general de la ONU, António Guterres, al presidente de Mozambique, Daniel Francisco Chapo, al presidente de Panamá, José Raúl Mulino, y al Emir de Catar, Tamim bin Hamad Al-Thani. La cumbre, que arrancó formalmente el lunes 30 de junio de 2025 y se prolongará hasta el 3 de julio, tiene lugar en el Palacio de Exposiciones y Congresos de Sevilla y reúne a más de 10.000 participantes entre líderes, técnicos y economistas y representantes de la sociedad civil.
