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En medio del revuelo mediático que gira en torno a su figura después de las demandas realizadas contra Miguel Ángel Revilla y Corinna, el Rey Juan Carlos reapareció públicamente en el Gran Premio de Baréin de Fórmula 1. No quiso perderse la cita y acudió el pasado 12 de abril de 2025 al circuito internacional de Sakhir para animar a los pilotos españoles, en especial a Carlos Sainz Jr. Su presencia en el evento se ha entendido como un intento por proyectar cercanía y normalidad en un momento complejo.
Durante la jornada, el Emérito se reunió con Carlos Sainz padre e hijo, a quienes saludó. "Lo he visto muy contento, ha sido un reencuentro muy cercano", comentaban desde su entorno. Una jornada agridulce, compensada con el gesto del monarca: Carlos Sainz Jr. partía desde la octava posición, pero tuvo que abandonar tras un incidente en pista. Por su parte, Fernando Alonso, que salía desde el puesto 13, terminó en el 16º lugar.
Todo esto ocurre mientras Juan Carlos I protagoniza titulares por otros motivos. Recientemente, ha presentado una demanda contra Miguel Ángel Revilla por "expresiones injuriosas" contra su figura, reclamando una indemnización de 50.000 euros que, según ha dicho, donará a Cáritas.
A todo este revuelo polémico sobre el expresidente de Cantabria, se suman las acciones legales tomadas contra Corinna Larsen y su antiguo tesorero, Dante Canonica. La Casa Real, sin embargo, ha aclarado que estas actuaciones "son privadas" y que no han sido informados desde Zarzuela, por lo tanto han querido mantenerse al margen de todas las acciones legales que está tomando Juan Carlos I.
¿Una tercera demanda?
El foco también se ha puesto sobre Bárbara Rey, aunque fuentes cercanas al Emérito afirman que no planea demandarla. "Bárbara tiene muchas cosas aún por contar del Rey", afirman desde su entorno, lo que ha generado cierta inquietud ante la posibilidad de que salgan a la luz detalles delicados.