-
Raúl Rodríguez y Silvia Taulés nos cuentan su papel en 'La familia de la tele'
-
Kiko Matamoros y Lydia Lozano: "Nuestro público es de todas las edades y RTVE tiene un público muy pegado a las novelas, al que tenemos que captar"
-
Carlota Corredera y Javier de Hoyos: "La tele tiene que representar al público también y aquí están todos los perfiles posibles&quo;
-
Así se tomó Felipe VI que la Infanta Sofía no quisiera recibir formación militar
-
Belén Esteban: "Estoy emocionada, muy contenta y muy feliz por llegar a RTVE"
-
Manu Baqueiro: "Tuve como referente a Bruce Willis en 'Luz de Luna' para mi trabajo en la serie 'Perdiendo el juicio'"
-
Magdalena de Suecia responde a las críticas y explica por qué le han permitido lanzar su propio negocio
Muchas han sido las ocasiones en que el Rey Felipe VI ha demostrado ser una persona 'de lo más normal'. A pesar de su relevante cargo público, el Monarca también aprovecha su tiempo libre para realizar actividades de lo más comunes. De hecho, no es la primera vez que se le fotografía yendo de compras solo o acudiendo al cine con la Reina Letizia.
Esta vez, el Rey Felipe asistió el martes 24 de abril a una comida de antiguos compañeros de su colegio, Santa María de los Rosales, en un restaurante del centro de Madrid. Punto Básico, ubicado en la calle Marqués de Urquijo, fue el local seleccionado para el encuentro, al que el Monarca acudió como uno más.
El Rey Felipe junto al propietario y dos empleadas del restaurante | Foto: InstagramComo señala El Mundo, en la reserva, hecha para 18 personas, no figuraba el nombre del Rey, por lo que tanto el personal del restaurante como el resto de comensales se vieron sorprendidos por su asistencia. De hecho, tras degustar el menú del día en una mesa ubicada en la planta baja del local, Felipe VI saludó y se fotografió con alguno de ellos, incluido el propietario, el empresario Eduardo Sánchez Costas.
Vestido formal
Debido a que Don Felipe llegaba de un acto institucional, pues por la mañana había entregado los Premios Internacionales de Periodismo Rey de España y el Premio Don Quijote, su atuendo era de lo más serio. A diferencia del resto de comensales, que vestían de manera informal, el Rey acudió con un traje diplomático y corbata. Sin embargo, su formal atuendo no le impidió disfrutar como uno más de la quedada, donde proliferaron diversas bromas y las típicas anécdotas de su época de estudiantes. Seguro que el Monarca pasó un rato de lo más distendido junto a sus compañeros.

