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La princesa Leonor ha alcanzado un nuevo hito en su formación militar: el pasado jueves 18 de diciembre realizó su primer vuelo en solitario en la Academia General del Aire y del Espacio de San Javier (Murcia), pilotando un avión Pilatus PC-21. La Casa Real difundió 19 imágenes inéditas de la denominada "suelta", el momento en que un alumno despega por primera vez sin instructor a bordo, tras superar las fases de teoría, simulador y prácticas de vuelo.
Este logro llega en el tercer y último año de su instrucción castrense, que la ha llevado a recorrer las tres academias militares, siguiendo el mismo itinerario que en su día completó el Rey Felipe VI. En 2023 ingresó en la Academia General Militar de Zaragoza, donde se formó como cadete y participó en maniobras de campo. En 2024 continuó en la Escuela Naval de Marín donde se embarcó en el buque escuela Juan Sebastián de Elcano, cruzando los océanos Atlántico y Pacífico en una travesía que puso a prueba su resistencia y disciplina. Ahora, en San Javier, culmina su preparación como alférez del Ejército del Aire y del Espacio, con un programa intensivo que combina instrucción teórica, simuladores y vuelos reales.
El primer vuelo en solitario supone un paso decisivo en su carrera militar y en su papel como futura jefa de las Fuerzas Armadas. La heredera al trono, de 20 años, ha demostrado que está preparada para asumir responsabilidades de alto nivel, en un proceso que busca reforzar su perfil institucional y acercarla a la experiencia de los militares españoles. La "suelta" es considerada uno de los momentos más simbólicos de la formación en San Javier, porque marca la transición de alumno a piloto autónomo, capaz de enfrentarse a la responsabilidad de volar sin supervisión directa.
Leonor, disciplina y compromiso en su camino hacia la Corona
Leonor, que en los próximos días regresará a Zarzuela para pasar las vacaciones navideñas con la Familia Real, ha vivido este logro con entusiasmo y discreción. Su paso por las academias militares ha sido seguido con atención por la prensa nacional e internacional, que destaca tanto la exigencia del programa como la voluntad de la Princesa de cumplirlo como una alumna más. En cada etapa ha compartido la vida cotidiana de sus compañeros, desde las guardias en Zaragoza hasta las maniobras navales en Marín, consolidando una imagen de disciplina y compromiso.
Con este vuelo en solitario, la Princesa Leonor se acerca al final de su formación castrense y refuerza su preparación para el futuro institucional que le espera. La Casa Real ha querido subrayar el carácter histórico de este momento, difundiendo imágenes que muestran a la heredera al mando del Pilatus PC-21, símbolo de que la princesa ya vuela sola, tanto en sentido literal como en el camino hacia sus responsabilidades como futura reina de España.
