El actor apareció sobre la alfombra roja con motivo de su papel protagonista en la película 'First Man', en la que interpreta a Neil Armstrong, el primer hombre que pisó la luna, y su aterrizaje en la ciudad vasca fue casi un hito histórico. En cuanto se bajó del coche, los cientos de fans que se apelotonaban frente al Kursaal no pudieron contener la emoción dejándose la voz. Tras saludar al director del festival, José Luis Rebordinos, decidió hacer de las delicias de la audiencia y no dudó en tomarse selfies y firmar autógrafos a aquellos que consiguieron llamar su atención en lo que realmente era una carrera de fondo.
Y aunque muchas de las estrellas que llegan hasta el festival están en plena promoción de sus trabajos, no todos gustan tanto de cumplir ante los fotógrafos y los fans que esperan durante horas ante el hotel María Cristina donde se hospedan todos durante la visita. Y para muestra la llegada de Claire Foy, compañera de reparto de Gosling, y de Lily-Rose Depp. La primera se bajó del coche que la traía desde el aeropuerto y su camino hasta el hall del hotel fue casi un visto y no visto. 10 segundos fue lo que tardó en resguardarse en el emblemático edificio.
El récord de Lily-Rose Depp
Pero de haber un premio a la carrera más fugaz ese sería para la hija de Johnny Depp. La joven, que ni se quitó las gafas de sol ni los auriculares, tardó la friolera de 6 segundos en llegar hasta la puerta del hotel poniéndoselo difícil hasta a los fotógrafos que se encontraban allí presentes. Depp ostenta desde el pasado sábado el tiempo récord en toda la historia del festival, que hay es nada. Eso sí, la también modeló cumplió con su agenda y enfundada en uno de sus vestidos joya de Chanel, como buena embajadora de la marca, posó ante los fotógrafos para presentar, junto a Laetitia Casta, la película 'A Faithful Man', dirigida por el marido de la segunda, Louis Garrel.