Lo que ha determinado esta investigación es que Shakira podría haber defraudado 14,5 millones de euros, cifra que se habría reducido bastante tras una serie de negociaciones, bajando de los 30 millones. Según ha informado El País, la Fiscalía que ha investigado el caso durante el último año ha enviado la notificación pertinente a la defensa de la cantante, por lo que en los próximos días presentará una querella ante el juez por tres delitos de fraude fiscal.
Lo más destacado de la investigación es que deben saber con exactitud dónde fijó Shakira su residencia fiscal desde el año 2011 y, según la Agencia Tributaria, ella vivía en Barcelona. La ley determina que si un ciudadano pasa la mitad de un año más un día en España, se le debe considerar como residente en lo que respecta a los aspectos fiscales. Por eso, Hacienda explica que Shakira simuló vivir en Bahamas para evitar el pago de impuestos.
La defensa de Shakira
El bufete de abogados de la cantante ha enviado un contundente comunicado sobre la situación: "La cantante ha cumplido con todas sus obligaciones tributarias y siempre ha actuado siguiendo el criterio y las recomendaciones precisas de Pricewaterhouse. Hasta 2015 Shakira nunca pasó más de 183 días en España, lo cual está comprobado, e incluso pasaba largas temporadas con sus hijos en otros países y singularmente en Estados Unidos, de donde procede la mayor parte de sus compromisos laborales". Además, añadían: "Su conducta en materia tributaria siempre ha sido intachable en todos los países en los que ha tenido que tributar".