Junto a su marido, Matthew Broderick; y a los tres hijos que tiene con él, James (2002) y las gemelas Tabitha y Marion (2009), la actriz ha disfrutado del paradisíaco paisaje de uno de los pueblos más hermosos de la costa italiana, Portofino. La familia entera se lo ha pasado en grande recorriendo las preciosas calles de la villa, pero una de las actividades más divertidas ha sido el paseo que se dieron a bordo de un yate en el que surcaron como auténticos marineros las cálidas aguas del Mar Mediterráneo.
Después de pasar un entrañable día de playa, todos los miembros de la familia se animaron a degustar los platos típicos de la gastronomía italiana y disfrutaron de una buena cena en una terraza para gozar de la noche veraniega. Algunos fans no pudieron resistirse a interrumpir la velada para saludar a Parker y hacerse alguna foto con ella, pero lejos de mostrarse molesta, la actriz se levantaba cada vez que se lo pedían para posar muy sonriente junto a los seguidores que la han llevado a la gloria.
Juntos, pero no revueltos
Más tarde, añadió que "su vida laboral lo lleva aquí, la mía allí. De alguna manera, creo que eso ha sido muy beneficioso porque cuando nos juntamos tenemos mucho que compartir", apuntó la actriz durante una entrevista en Girlboss Radio. Ojalá que pasar estas vacaciones de verano juntos no haga mella en su matrimonio, que ha resistido durante 20 años a todas las adversidades a las que una pareja puede hacer frente.