Por tanto el futbolista no pudo estar presente en el parto de su segundo hijo, como tampoco en sus primeros días de vida. La modelo se encargaba de mantenerle bien informado con vídeos, fotografías y mensajes, pero Suárez no podía más que tachar días y horas para volver a casa y poder estar junto a su familia algún tiempo.
Ese momento acaba de llegar. El deportista, aprovechando unos días libres, ha vuelto a España -donde, al menos en principio, se quedará su familia- para poder conocer por fin al pequeñajo y terminar el mes de agosto junto a su mujer y sus dos hijos.
Un reencuentro que el matrimonio ha querido compartir con sus seguidores de las redes sociales, donde han publicado una fotografía de una tarde al sol antes de dejar a los peques en casa para disfrutar de una romántica cena en la que tenían muchas cosas por las que brindar.
El verano más especial de sus vidas
Y es que no hay que olvidar que, además de haber celebrado el pasado junio el primer cumpleaños de Matilda y acabar de dar la bienvenida a Mario, este verano también se han dado el 'sí quiero' en una boda sorpresa que el futbolista preparó en secreto en Mallorca. Una preciosa ceremonia al lado de la playa en la que todos lo invitados iban vestidos de blanco a la que Malena Costa llegó con los ojos tapados creyendo que era una pequeña fiesta familiar de verano.