Paula Echevarría por fin ha disfrutado de una reunión familiar al completo, algo que deseaba desde hace mucho tiempo. La actriz ha podido viajar hasta Cadás, su pueblo natal ubicado en Asturias, y ha sido ahí donde ha podido ser vista junto a toda su familia, incluyendo a sus padres, su hermano, su cuñada, sus sobrinas, su hija y, cómo no, su chico Miguel Torres.
Paula Echevarría paseando de la mano de Miguel Torres por CandásLa asturiana pudo ser vista con su novio paseando por su pueblo agarrados de la mano después de que salieran a comer a uno de los restaurantes de la localidad. Primero salió la familia del local y después lo hizo ella con Miguel Torres, yendo en ese momento por separado.
Pese a que no se soltaron la mano en ningún momento, lo cierto es que el semblante de la actriz era bastante serio, aunque quedaba escondido tras la mascarilla. Por otro lado, y teniendo en cuenta la zona en la que se encuentra su pueblo, a pesar de las altas temperaturas en el resto del país, ambos llevaban manga larga, para protegerse del fresco verano del que se puede disfrutar en el norte.
Paula Echevarría y Miguel Torres paseando por CandásEste reencuentro ha sido muy esperado por Echevarría puesto que ha pasado la cuarentena en su casa de Madrid acompañada de su novio y de su hija, con la que ha compartido numerosos momentos en las redes sociales. La intérprete, para mantenerse entretenida durante el confinamiento, no ha parado de subir vídeos a su cuenta de Tik Tok, y adelantó en 'El Hormiguero' que estaba haciendo mucho deporte, pero que también estaba comiendo por tres.
Ha pasado algunos días separada de su hija
Mientras que han estado en Madrid, y a pesar de que ha podido compartir muchos momentos con su hija, se ha tenido que separar de ella en más de una ocasión para que se marchara con su padre, David Bustamante, puesto que a pesar de que las visitas no estaban permitidas entre familiares, en caso de que se tratara de hijos de padres divorciados, sí cabía la posibilidad.
