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La cantante sevillana, Pastora Soler, ha publicado sus memorias 'Cuando se apagan las luces, aparecen las estrellas', este 5 de noviembre de 2025. En el libro, la cantante se ha abierto en canal y ha decidido contar todos los detalles sobre su carrera, desde el pánico escénico que sufría, hasta los bloqueos creativos con los que ha tenido que lidiar.
Si algo ha llamado la atención de todo su público, es el hecho de que en este libro, la intérprete ha decidido hablar por primera vez del terrible episodio que vivió y que le llevó a abandonar los escenarios. Pastora recuerda con detalle aquel momento de 2014 en el que, en plena gira, su cuerpo y su mente dijeron basta. "Si hubiera encontrado algo a mano, me habría quitado la vida ", escribe en uno de los capítulos más desgarradores de sus memorias.
Tras aquel colapso, Pastora Soler comprendió que debía parar y se retiró de los escenarios en 2014, dejando en pausa su exitosa carrera. Aunque la decisión sorprendió a sus seguidores, fue un acto de supervivencia: "No sé qué habría sido de mí si llego a seguir con esa tortura ", confiesa. Durante ese retiro, se centró en su familia, buscó ayuda profesional y se dedicó a sanar las heridas que le había dejado la presión mediática.
Su lado más familiar
Con el tiempo, Pastora regresó a la música y aprendió a priorizar su bienestar emocional. La cantante ha confesado que su familia fue lo más importante, principalmente su marido, que fue una pieza clave en su recuperación y ha confesado que encontró en la maternidad su salvación: "Quedarme embarazada fue mi salvación. Tocaba ser pilar, la mujer, la madre, la esposa, la hija, la hermana, la amiga... Tocaba empezar a disfrutar de la vida ", explica.
Con la publicación de sus memorias, Pastora Soler busca inspirar a quienes atraviesan momentos de oscuridad. Su historia no solo habla de éxito y fama, sino también de vulnerabilidad y superación. Con honestidad, la cantante demuestra que detenerse no es fracasar, sino una forma de volver a empezar. Su testimonio se ha convertido en un símbolo de esperanza para muchos de sus fans.


