APOYANDO A PONCE

El motivo por el que Ana Soria abandonó precipitadamente la plaza de toros de Granada

La joven tuvo que abandonar la plaza de toros de Granada antes de que terminase el festejo y por ello se ha visto obligada a dar explicaciones.

Ángela del Caz Martín 28 Septiembre 2020 en Bekia

Galería: Enrique Ponce y Ana Soria: un amor que no entiende de edad

Tras el susto que se llevó con la cogida de Enrique Ponce en El Puerto de Santa María, Ana Soria tardó en volver a sentarse en el tendido para seguir desde allí las faenas de su pareja. Un apoyo presencial que retomó en la plaza de toros de Nimes y que ahora se ha repetido en Granada.

Sentada en barrera junto a un amigo, la joven estuvo siguiendo con mucha atención la tarde de toros. El diestro, entre faena y faena, estuvo muy pendiente de su chica, a la que cogió de la mano en alguna que otra ocasión como muestra de cariño. Pero llegado un momento de la tarde, Ana Soria abandonó la plaza de toros sin que hubiera acabado el festejo.

Como es lógico dado que todas las miradas se posan en ella cada vez que aparece por la plaza de toros, nadie dejó pasar el hecho de que la estudiante de Derecho abandonó su asiento antes del final de la tarde. La pareja de Ponce se sentó cerca de la salida antes de abandonar la plaza de toros, algo que rápidamente hizo saltar las habladurías sobre si habría sido increpada o abucheada por alguno de los aficionados allí presentes.

Una indisposición obligó a Ana Soria a irse antes

No obstante, Ana Soria ha querido aclarar lo sucedido a través de las redes sociales, asegurando que en ningún momento sintió nada de eso por el público presente, más bien todo lo contrario, le apoyaron y ayudaron cuando se sintió indispuesta, algo que se podía apreciar en cierto modo en su rostro. Así lo ha explicado: "Ayer me fui de la plaza de toros de Granada porque me encontraba mareada y decidí salirme. Todo lo demás es completamente inventado".

Y además ha querido dejar claro que se sintió arropada por los allí presentes, a los que les agradece su preocupación: "La gente se mostró más que cariñosa conmigo. Nada de lo que han dicho es verdad. Gracias a todos los que os habéis preocupado pero ayer fue una tarde muy bonita y no hubo ningún tipo de altercado".