Antes de trasladarse a Cuzco, Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa han recorrido los lugares más emblemáticos de Arequipa.
Tras celebrar su 81 cumpleaños soplando las velas durante su visita a una tienda de dulces de Arequipa, Mario Vargas Llosa ha asistido al Foro Internacional 'América Latina: desafíos y oportunidades' para hablar sobre la democracia y sus perspectivas futuras. Hasta el Colegio de Abogados de la ciudad también se acercó su primogénito, Álvaro Vargas Llosa, que participó activamente en este acto organizado por la Fundación Internacional para la Libertad, de la que el escritor es su presidente. La gran ausente en el actor fue Isabel Preysler, que aprovechó esas horas para irse de compras y renovar su fondo de armario con creaciones peruanas. Con un look muy casual, la empresaria se acercó hasta un conocido centro comercial, donde visitó algunas de las tiendas de moda más importantes de la zona.
Más tarde, en su último día en Arequipa antes de trasladarse a Cuzco, la pareja ha aprovechado para hacer algo de turismo. Así, la pareja se acercó hasta uno de los edificios con más historia, el Convento de Santa Catalina, que ahora se ha convertido en un complejo turístico religioso, pero que conserva la estructura de su creación, allá por 1579.
Su recorrido turístico por Arequipa
Acompañados por un guía turístico, que les fue explicando cada detalle, visitaron las distintas estancias y el patio central, de gran belleza arquitectónica y que fue muy del agrado de la reina de corazones. En su interior destacan el sillar blanco que proviene del volcán Chachani y el rosado del Misti, este último emblema de la ciudad.
Después Mario Vargas Llosa e Isabel Preysler aprovecharon para pasear por los alrededores del convento, que es Patrimonio de la Humanidad. Así, recorrieron algunas de las calles más pintorescas y admiraron algunos de los edificios más emblemáticos de la zona.