Según El Mundo, el diseñador acompañó a la Policía para prestar declaración y aclarar el asunto, y parece ser que no era consciente de que no se podía llevar tantos cartones a pesar de que fuera a fumarse él mismo todos esos cigarrillos, puesto que muchas personas procuran llevarse el máximo número de cigarros de las islas para luego hacer negocio en la península y venderlo a un precio mayor.
Caprile tuvo que tomárselo con humor y se quedó sin sus cartones, zanjando el asunto y yendo a la estación de Santa Justa de Sevilla para coger un AVE y regresar a Madrid. De esta manera cumplió con su obligación como ciudadano, pero solo se pudo quedar uno de los cartones de los seis que llevaba en su maleta.
Polémicas en su programa
Pero ahí no se quedó todo, porque siguió diciendo: "Estamos ya en la quinta semana de taller y no puedes seguir presentando estos trabajos. Es una tomadura de pelo a nosotros, a tus compañeros y a las modelos. Esto es un error. Al final siempre quedo yo de malo, pero la gente no va vestida por la calle con intenciones, ¡va vestida con ropa!".