Una de las grandes ilusiones de Elena Tablada era casarse en la iglesia que lo hicieron sus abuelos, y su sueño se vio cumplido pasando por el altar con Javier Ungría. La diseñadora disfrutó de una boda de ensueño, pero parece que no todos los invitados consiguieron estar cómodos.
es evidente que Elena Moura, la abuela de la diseñadora, estaba muy feliz, pero no lo disfrutó como le hubiese gustado. Según Informalia, la abuela de Elena Tablada no quería que se casase en Cuba. Moura, que se casó a los 19 años en la misma iglesia que ha elegido su nieta, abandonó Cuba en la década de los setenta huyendo de la dictadura castrista y juró no volver al país hasta que el régimen comunista acabase.
Elena Tablada y su madre en la presentación de la obra de teatro 'Más sofocos' en MadridLo que no esperaba era volver a los 90 años con el régimen comunista en vigor. Elena Moura le pidió a su nieta que celebra su boda en otro lugar, pero le dio exactamente igual. Fue la Iglesia de San Juan de Letrán la que acogió la ceremonia, un choque emocional muy fuerte para la anciana, donde revivió muchos momentos.
Un choque emocional importante
En este viaje fue aver la casa en la que vivió, y fue algo muy impactante para ella, más que nada porque en 50 años todo ha cambiado para ella y vio la cuidad mucho más deteriorada que la dejó. Por lo pronto, lejos de este inconveniente, la boda parece que salió de maravilla.
