Galería: Anabel Pantoja, la prima más famosa
Lo que prometía ser un fin de semana de celebración terminó en urgencias para Anabel Pantoja, que ha vivido un episodio inesperado durante la celebración de su 39 cumpleaños. La sevillana ha sufrido una caída que le ha provocado lesiones en el pie y el brazo, obligándola a recibir atención médica y a llevar una escayola en el brazo derecho.
Tras unos días de silencio, Anabel ha aparecido en redes sociales con un vídeo en el que explica lo ocurrido. En él, se muestra con el brazo vendado aunque con su habitual humor. La caída, según relata, fue tan aparatosa que tuvo que ser asistida de urgencia. "El viernes, sufrí una caída asquerosa. Donde me lastimé y jodí bien... se me dobló el pié y se me salió el codo literal ". A pesar del susto, ha querido tranquilizar a sus seguidores asegurando que se encuentra bien y en proceso de recuperación.
La influencer ha aprovechado el comunicado para destacar el papel de sus amigos, que estuvieron a su lado desde el primer momento. "Fue un momento horrible y angustioso, de dolor y desesperación pero tenía a los mejores amigos a mi lado para no dejarme ni un minuto sola", dejando claro que su entorno ha sido clave en estos días complicados.
Además de relatar el accidente, Anabel ha lanzado un mensaje contundente a quienes la critican. En el vídeo, grabado en un supermercado, se la ve bailando con el brazo escayolado y acompañando la escena con una frase que no ha pasado desapercibida: "A las personas que me desearon el mal, aquí sigo, sobreviviendo a todos los golpes, gilipo***". Una declaración que ha sido interpretada como una respuesta directa a sus detractores.
Una racha complicada, pero con actitud
El accidente llega apenas unos días después de otro episodio que también puso a prueba la paciencia de Anabel: la pérdida de sus maletas por parte de la aerolínea Vueling, que dejó sin ropa tanto a ella como a su hija durante un viaje a Barcelona. En aquella ocasión, la influencer se mostró visiblemente afectada, pero logró resolver la situación con ayuda de su entorno. Ahora, con el brazo escayolado y un nuevo susto a cuestas, vuelve a demostrar que, pese a los golpes, sigue adelante con humor, carácter y unos amigos que no dejan de apoyarla.