Parece que la relación entre Ana Obregón y Alessandro Lequio ha llegado ya a su fin. Los que fueran pareja se habían mostrando muy unidos públicamente durante la enfermedad de su hijo Aless Lequio y también en el complicadísimo momento de su muerte, pero de aquello parece que solo queda el triste y dolorosísimo recuerdo. Desde aquel duro mes de mayo de 2020, la actriz se propuso cumplir con las que supuestamente fueron las últimas voluntades de su único hijo, un empeño personal con el que no estaría del todo de acuerdo el colaborador de 'El programa de Ana Rosa', siendo la gota que colmó el vaso la llegada al mundo de la que también es su nieta, Ana Sandra.
Tal y como publica hoy la revista Lecturas, fuentes cercanas del entorno laboral de Lequio asegurando que este tiene una actitud muy diferente respecto a este tema cuando no está delante de las cámaras mientras que, cuando se enciende el piloto, este es parco en palabras y prefiere dejar todo la intimidad porque, al fin y al cabo, Ana Obregón no deja de ser la madre de su hijo Aless: " Se calla y prefiere no enfrentarse a Ana por miedo al escándalo, tiene mucho que proteger ".
"Prefiere no enfrentarse a Ana por miedo al escándalo"
A pesar de ello y como ya se pudo interpretar en algunas de sus intervenciones públicas, el colaborador no parece comulgar mucho con la decisión de la también actriz de traer al mundo a través de vientre de alquiler a la que es la hija de Aless al haber utilizado el semen que este había congelado durante su enfermedad. Ahora ya fallecido, esto ha enrevesado muchísimo las cosas siendo Ana Sandra nieta de ambos por la carga genética, pero hija adoptiva de Obregón por sentencia judicial en Miami.
Alessandro Lequio ha mantenido un perfil público discreto respecto a este tema | Foto: Telecinco.esEn cambio y de ser ciertas las palabras de Kiko Hernández en 'Sálvame' cuando salieron a la luz las primeras imágenes de Ana Obregón con su hija en brazos, habría sido el Conde Lequio el que poco después de la muerte de Aless Lequio se puso en contacto con el colaborador para interesarse sobre cómo había llevado él a cabo el proceso para tener a sus dos hija también por gestación subrogada, lo que mostraría cierta implicación, al menos al principio, en el ahora tan polémico proceso.
Algo cambió desde entonces y Lequio sí que mostró cierta desconformidad respecto a la decisión de Ana Obregón. El colaborador, que en un principió simplemente apuntó que "yo lo sé todo", añadió horas más tarde que se estaba enterando de muchas cosas que desconocía y que no le estarían gustando tanto. Tras esto, reconoció que su opinión más sincera se la guardaba para su entorno más cercano y decidía seguir con su vida lo más ajeno posible a todo esto: " Llevo 25 años casado y con una familia. Mi vida es otra. Yo no tengo por qué enterarme de la vida de otra gente. Eso es pasado remoto ", sentenciaba.
