Víctor Sandoval ha explotado y ha confesado cómo se siente a sus compañeros: "Yo estaba aquí como vaca sin cencerro, sin rumbo, sin orientación, perdido...".
No es nuevo que Víctor Sandoval está pasando por uno de los peores momentos de su vida. Y es que, al colaborador se le han juntado varias desgracias, pero sin duda la más traumática para él ha sido tener que lidiar con la muerte de sus padres en tan solo tres meses de diferencia. Es por eso que el televisivo se muestra más sensible de lo normal. La última muestra de tristeza llegaba después de que Kiko Matamoros lo acusase de no ver los vídeos.
Ante las acusaciones de sus compañeros, Víctor Sandoval ha querido sincerarse con sus compañeros de 'Sálvame': "¡Cuidado! ¡Cuidado! ¡Conmigo, no! Que yo no soy Anabel Pantoja, que yo si atiendo a los vídeos, que lo que más intento cuidar yo es mi trabajo", decía muy exaltado el ex de Nacho Polo intentando defenderse. Víctor Sandoval: "He pasado un año fatal"
Sin embargo, el colaborador se derrumbó instantes después, cuando quiso desahogarse con todos sus compañeros. "Yo la semana pasada lo pasé muy mal, menos mal que con Valldeperas me subió un poquito el ánimo. Yo estaba aquí como vaca sin cencerro, sin rumbo, sin orientación, perdido...", confesaba visiblemente afectado ante las advertencias que le hacían sus compañeros sobre involucrarse más en el programa.
"He pasado una etapa muy depresiva, he pasado un año fatal, pasé un año horroroso... y tengo la manía de ser una 'drama queen' en esencia... yo no veo el vaso medio lleno, yo siempre veo el vaso medio vacío. Ha habido días, y os lo digo completamente en serio, que pienso ojalá muera de un infarto por la noche para no enterarme, te lo juro con el alma", aseguraba Víctor Sandoval mientras sus compañeros intentaban consolarle y ayudarle.
Sin embargo, el propio Victor era también quien confesaba que vuelve a tener ilusión por ir a trabajar: "Ahora ya vengo al trabajo ilusionado. Pero no ilusionado con un novio ni nada, ilusionado con el trabajo. Porque yo antes venía al trabajo como si me dices de ir a comprar pollo, es que me daba igual", confesaba ante la sorpresa de sus compañeros.