Pablo Alborán se encuentra n el centro de una situación preocupante. Según ha revelado el programa 'Fiesta', el cantante está recibiendo mensajes obsesivos por parte de un fan anónimo que asegura estar enamorado de él. "Así que esto es el amor, eso que le da sentido a la vida. Pablo, tú eres todo eso para mí, te amo total, completa y absolutamente", expone en uno de los comentarios enviados a través de Instagram.
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Comentario de un fan anónimo en el Instagram de Pablo Alborán | Foto: Telecino.esEl contenido de los mensajes ha ido escalando en intensidad. En uno de ellos, el remitente afirma haber viajado hasta "su rincón en este planeta" y asegura haber conversado "largo rato" con el padre del artista, aunque finalmente no logró coincidir con él. "Mi regreso a Puerto Rico resultó ser doloroso por esa razón", añade el mensaje, que ha encendido las alarmas por su tono obsesivo y fantasioso.
Comentario de un fan anónimo en el Instagram de Pablo Alborán | Foto: Telecino.esLa periodista Concha Calleja ha explicado en el programa que no es la primera vez que Pablo Alborán se enfrenta a este tipo de situaciones. "Han suplantado su identidad y ha habido otros acosos que él mismo ha denunciado", señaló. Calleja también destacó que este tipo de mensajes llegan como si el remitente conociera personalmente al artista, lo que genera una sensación de invasión.
El entorno de Alborán desmiente los hechos
Iván Reboso, colaborador del programa, ha contactado con el entorno del cantante, que niega rotundamente que el padre de Pablo haya hablado con ningún fan. "No han tenido conocimiento de este acoso. Pablo es una persona muy natural, muy cuidadosa con su privacidad", explicó Reboso. También advirtió sobre el peligro de este tipo de fantasías: "Las mentes de algunos fans enfermos distorsionan la realidad. Un día puede suceder algo grave ".
Por el momento, Pablo Alborán no se ha pronunciado públicamente sobre este nuevo episodio. Su equipo mantiene una postura discreta, aunque no descartan tomar medidas si la situación se agrava. El caso vuelve a poner sobre la mesa el problema del acoso digital a figuras públicas, especialmente en redes sociales.
