La colaboradora fue a por todas, revelando los problemas económicos que tuvo por culpa de su exrepresentante.
La noche del 23 de febrero de 2019 el plató de 'Sábado Deluxe' estuvo cargadito de noticias bomba. Una de las protagonistas de esto fue Belén Esteban, quién reveló varias informaciones relacionadas con su exrepresentante, Toño Sanchís. La colaboradora aseguró que ya va ir a por él y a por su mujer bajo la vía penal cuando se resuelva todo el problema de la casa y la deuda: "Yo no lo hago por hacer daño ni por molestar a esta familia. Lo hago porque durante dos años y pico, este señor ha ido a programas de televisión a ponerme verde a mi y a mi familia. Y yo, mi pareja y mi familia tenemos dignidad. Voy a ir por lo pena contra él y contra su mujer. Voy a por todas".
Pero esto no fue todo. Belén Esteban reveló durante la entrevista un gran secreto: pidió un préstamo para pagar Hacienda. "Las cantidades que debía a Hacienda las pagué mediante un préstamo con Miguel. Le decía a él que llevo toda la vida trabajando y que me tuviera que ver así...", revelaba con la voz rota. "Pedí un préstamos de 700.000 euros con un interés altísimo, del 7%, que ya está pagado. El que estuvo conmigo ahí fue Miguel".Pujó por la casa de Toño Sanchís
Como era de esperar, la puja de la casa de Toño Sanchís salió a la luz. Pero lo sorprendente fue la revelación de Belén Esteban: pujó por la casa. Eso sí, era todo una estrategia por la deuda que tiene Toño Sanchís con ella de 600.000 euros, más las costas e intereses: "Yo no tenía que poner dinero ninguno. Ese dinero me lo restaba de la deuda. Cayendo la tarde, mi abogado y Begoña dicen que hay que empezar a hacer pujas fuertes: pujé 25.000, que me lo restaría de la deuda. Aunque nos pusimos de tope unos 375.000 euros". Finalmente, pujaron más que ella y lo superaron.
Pero, además de todo esto, la colaboradora contó que Toño Sanchís intentó hacer un pacto con ella: "El primer día que sale la casa a subasta, su abogado llama al mío para llegar a un pacto. Este era darme 200.000 euros a 'tocateja'. Durante cuatro años, anualmente me daría 50.000. Así, le tendría que perdonar 225.000 euros y no lo hice porque es mi dinero. Pero, lo mejor de todo, es que tenía que firmar un documento que si no me daba ese dinero, yo no le podía denunciar". Bastante mosqueada, le dejaba las cosas claras a su exrepresentante: "Cariño mío, yo trabajo, no me llevo lo que no es mío".