Allí se sentó el domingo 20 de mayo para hablar con Risto Mejide sobre cómo es la vida con un hijo con parálisis cerebral. Un hijo que para el escritor es "una pasión, un dolor, una alegría, una contradicción". Sin embargo, ha negado en rotundo sentirse agradecido con la vida por haberle dado a su hijo: "Estoy cabreado porque me parece injusto e intolerable".
Uno de los momentos más duros de la entrevista se produjo cuando el presentador le preguntó si volvería a tener al joven que ahora tiene ya más de 30 años. Aberasturi lo dudó durante unos instantes, aunque finalmente se decantó por una respuesta negativa con el siguiente argumento: "Cris vive una estafa, no una vida. No encuentro razón por la que merezca la pena vivir una vida sin libertad como la que tiene".
Dudas existenciales
A raíz de todo ello el periodista reconoce haberse planteado seriamente la existencia de Dios, aunque para él su verdadero dios es su hijo: "Él es la inocencia y la ingenuidad en estado puro". Él es su máxima preocupación y le atormenta la idea de qué pasará con él el día de mañana. En cualquier caso, si pudiese decirle algo que realmente entendiese y pudiese reaccionar a ello, Aberasturi lo tiene claro: "Te queremos mucho, Cris".