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Este miércoles, 27 de agosto, los Reyes de España, Felipe VI y Letizia, viajaron hasta Castilla y León para recorrer las zonas más castigadas por los incendios forestales que en las últimas semanas han dejado tras de sí graves daños materiales y varias víctimas mortales. La primera parada fue el Parque Natural del Lago de Sanabria y las Sierras Segundera y de Porto, en la provincia de Zamora.

Felipe y Letizia se interesaron por la situación de los habitantes y mostraron su agradecimiento a los equipos de extinción, protección civil y voluntarios que han trabajado sin descanso. Según fuentes de Casa Real, Sus Majestades "quieren mostrar su reconocimiento y gratitud a quienes han combatido el fuego en condiciones extremas, protegiendo a la población civil y a los espacios naturales".
En declaraciones realizadas durante su visita, Felipe puso en valor la capacidad de coordinación entre las diferentes administraciones y la labor de la Unidad Militar de Emergencias (UME), que ha desplegado efectivos en varias comunidades. Cabe recordar que el pasado 17 de agosto, el monarca acudió al Cuartel General de la UME en la Base Aérea de Torrejón para informarse personalmente sobre los trabajos de extinción.
Próximas visitas en Galicia y Extremadura
El viaje a Zamora ha sido solo la primera parada de un recorrido más amplio. Este jueves 28 de agosto, Sus Majestades tienen previsto desplazarse a Galicia, otra de las comunidades más afectadas por los incendios, y el viernes 29 harán lo propio en Extremadura. Con esta agenda, la Casa Real pretende dar continuidad a su apoyo a todas las regiones golpeadas por la catástrofe.

Pese a encontrarse oficialmente en periodo vacacional, Felipe y Letizia han decidido alterar su agenda privada para priorizar el contacto con los damnificados, como ya hicieron en anteriores emergencias. El pasado noviembre, por ejemplo, visitaron Paiporta (Valencia) tras la DANA que causó graves inundaciones. La Reina Letizia entonces insistió en la importancia de mantener la ayuda a largo plazo y no limitarse a las primeras semanas posteriores al desastre.