Marivent fue por segundo año consecutivo el escenario en el que se celebró la recepción a las autoridades de Illes Balears y a una representación de la sociedad balear. Los Reyes Felipe y Letizia y la Reina Sofía ejercieron de anfitriones de este acto celebrado en la explanada situada entre el palacio y sus jardines, un espacio en el que estuvieron unos 600 invitados.
Los Reyes Felipe y Letizia y la Reina Sofía hablando en la recepción a la sociedad balear en MariventLos Reyes y Doña Sofía saludaron a políticos baleares, a los ganadores de los Premios Ramón Llull 2023, a los que obtuvieron los Premios Art Jove 2022, a sanitarios, personal de protección civil, miembros de asociaciones, organizaciones y colectivos sociales, gente de las artes, el cine, el teatro o la música, arquitectos, científicos e investigadores y representantes del mundo gastronómico y deportivo. Como señala Vanitatis, todos ellos degustaron un menú que constó de 15 platos.
El catering fue obra de los hermanos Dani y Maca de Castro y estuvo formado por ensalada líquida de judía tierna, croquetas de sobrasada y de mejillón de Menorca, trampó de tomate de Valdemossa, cacahuetes con cuatro especias, 'pa amb oli' con queso mahonés y camaiot, espinagada de anguila, banderilla poblera, coca de berenjena con queso curado y arenque y raya con tumbet y codorniz con escabeche.
Los Reyes Felipe y Letizia y la Reina Sofía con representantes del Mallorca Palma Futsal en MariventSe sirvieron además tres postres. El primero de ellos fue ensaimada con chocolate, un dulce que no podía faltar al ser el más icónico de Mallorca. Además de eso, hubo gató con cremoso de limón y pino piñón. El cóctel fue regado con vinos Pla i Llevant y Binissalem.
50 años de veraneo en Marivent
Con este menú, Don Felipe y Doña Letizia, así como la Reina Sofía, quisieron agasajar a la clase política y representantes de la sociedad balear en esta recepción celebrada en el verano en el que se han cumplido 50 años desde que la Familia Real comenzó a veranear en el Palacio de Marivent. Fue en 1973 cuando los entonces Príncipes Juan Carlos y Sofía y sus hijos comenzaron sus veraneos en Mallorca en esta residencia que perteneció a Juan de Saridakis.
