Las presiones que está sintiendo puede que le hagan declarar, sin embargo, parece que se tomará todo con bastante cautela.
La vida del Príncipe Andrés de Inglaterra ha cambiado sustancialmente después de que concediera una entrevista en televisión en la que habló públicamente de su vínculo con Jeffrey Epstein, que fue condenado por tráfico de menores y con el que al parecer tuvo una amistad. Estas palabras hicieron que anunciara poco después su retirada de la vida pública, pero la historia del que a priori fue su amigo le sigue persiguiendo.
Pese a haber estado alejado del foco mediático, la historia continúa y desde entonces no ha parado de estar perseguido por las polémicas, sin embargo, en todo momento ha contado con el apoyo incondicional de su madre la Reina Isabel. En un primer momento la Fiscalía de Nueva York informó que no había colaborado en absoluto en el caso, después se le relacionó con Epstein y más tarde se habló de su impago de su chalet de Suiza. Y ahora parece que estaría dispuesto a colaborar con las autoriades estadounidenses, aunque habría puesto una condición. Ha dicho que se negará a hablar con el Departamento de Justicia de los Estados Unidos hasta que no le ofrezcan una tregua, según informa el medio Daily Mail. El departamento de Justicia estadounidense y él han vivido tensiones después de que este departamento pidiera al Ministerio del Interior británico que le interrogara y de que el Duque de York dijera que se había ofrecido a declarar como testigo y que los fiscales estadounidenses habían violado las reglas de confidencialidad y habían emitido mentiras completas sobre él.
Y ha sido una fuente cercana al Príncipe Andrés la que ha dicho lo siguiente: "Hasta que no haya una tregua por parte del Departamento de Justicia y un intento de establecer lazos de confianza, no podemos tratar con Ellos. Han estado pintando una imagen completamente inexacta. Ha habido tres infracciones demostrales de las propias reglas del Departamento de Justicia, mientras el Duque ha respeto las reglas y el proceso".Con mucha cautela
Fue en abril de 2020 cuando el Ministerio del Interior británico recibió la solicitud de interrogatorio para que el Príncipe Andrés de Inglaterra acudiera a comparecer con los magistrados británicos, pero parece ser que está viviendo todo con máxima cautela en estos momentos después de que tras la entrevista que concedió tuviera que dejar sus deberes para con la Casa Real británica.