El tenista ha viajado con su familia para seguir cumpliendo con sus compromisos profesionales después de haber sido padre.
Rafa Nadal siempre ha acudido a sus torneos recibiendo el apoyo incondicional de su familia, y en esta ocasión no iba a ser menos, porque su mujer Xisca Perelló le ha acompañado en la Copa de Maestros 2022 celebrada en Turín, Italia, y no ha viajado sola, sino que con ella ha ido el pequeño Rafael, el bebé recién nacido del matrimonio.
Ha sido la revista ¡Hola! la que ha desvelado que los tres se han trasladado hasta dicho lugar, así que, mientras Rafa Nadal se ejercitaba en los entrenamientos de cara a la última gran competición de tenis del año, ella fue vista con su hijo en el carrito dando un paseo, muy recuperada además del parto. Tras los entrenamientos hacían un plan familiar, saliendo a cenar siendo tan discretos como siempre, algo que lo han demostrado durante todos estos años de su relación, así como durante el embarazo. Por lo pronto, quieren preservar la intimidad de su hijo y de momento no han compartido ninguna foto de él en público, es más, el tenista no se ha hecho eco de ello a través de sus redes sociales.
El tenista ha sido muy bien recibido en su visita a Italia, algo que se pudo apreciar en la plaza San Carlo, donde era aplaudido y vitoreado durante su aparición con motivo de su encuentro con la prensa de las ATP Finals. Con una sonrisa se dejó ver por allí, saludando a numerosos fans que allí se dieron cita. Le resulta difícil separarse de su hijo
Lo cierto es que a pesar de que sea muy discreto on su vida privada, no ha tenido ningún reparo en hablar de su lado más personal con la prensa en una de sus últimas intervenciones. "Siempre ha sido duro irme de casa para jugar, sinceramente, pero ahora con mi hijo más aún", decía, aunque si bien es cierto, parece que no será un inconveniente hacer estos viajes juntos en familia, como hacía antes su mujer para prestarle todo su apoyo. "Es positivo tener las videollamadas, porque puedo ver al pequeño todas las veces que quiera, algo que las otras generaciones no podían hacer, así que se hace menos duro", confesaba.