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Corren tiempos turbulentos en la familia Ortega, y es que la hija de Amancio Ortega, Marta, se ha separado de su marido, Sergio Álvarez, con el que se casó en febrero de 2012 en una boda celebrada en el Pazo de Drozo, en Anceis, A Coruña.
Según Vanitatis, el jinete Sergio Álvarez se fue de la casa que compartía con su mujer y con su hijo Amancio (de año y medio) en A Coruña y se ha establecido en Asturias, Principado del que es originario y donde viven sus padres. Hasta allí se habría llevado también sus caballos del centro hípico de Amancio Ortega, Casa Novas, hasta su cuadra de Gijón.
Los padres no quieren que tiren la toalla
El jinete asturiano ha negado a la citada fuente que se haya separado de Marta Ortega, sino que todo el movimiento se debe a que tanto uno como el otro competirán en el Vilamoura Champions Tour 2014, que se celebra entre el 2 y el 5 de octubre, y en el que ambos están apuntados.
Al parecer, la familia de ambos no desea que el matrimonio se vaya al traste, por lo que no quieren que se hable en público todavía de ruptura, y menos aún de divorcio, al menos hasta que hayan intentado todo para salvar su relación.
Aunque solo han estado casados durante dos años y medio, lo cierto es que llueve sobre mojado, ya que la pareja tuvo una fuerte crisis hace seis meses, que en aquel momento pudieron superar debido a que fue menos intensa que la que les ha llevado a vivir cada uno por su lado.

